La primera subida será en marzo y pasará de costar 17,50 a 18,375 euros
01 feb 2014 . Actualizado a las 12:13 h.En marzo acaba la tregua. Termina un año sin sobresaltos y sorpresas desagradables. Desde mediados del 2013, el precio de la bombona de butano está congelado en 17,50 euros. Es el tope anual que fijó el Ministerio de Industria para proteger, entre comillas, a los millones de consumidores que recurren a ese combustible relativamente barato. Pero ya en marzo pasado advirtió el Gobierno que la medida era por un año, tras el cual habría nueva fórmula para fijar el precio. La hay. La bombona de butano seguirá estando regulada, pero se ampliará el margen de subidas. Además, el precio se revisará cada dos meses, no cada tres como ahora.
A falta de que el ministerio detalle, vía Boletín Oficial del Estado, lo que ocurrirá, la patronal del sector lo tiene claro: la bombona subirá cada dos meses el máximo, el 5 %, con lo que en marzo del año que viene se habrá acumulado un incremento del 34 %. Es decir, la bombona que ahora cuesta 17,50 euros, subirá en marzo a 18,375. Y en el 2015 habrá que pagar por ella 23,45 euros.
José Luis Blanco Garrido, secretario general de la Asociación Española de Operadores de Gases Licuados del Petróleo (AOGLP), explica que con esa revisión al alza se empezará a saldar el déficit que ha empezado a generar el negocio regulado. Las subidas acabarán cuando la deuda sea cero y los consumidores abonen lo que realmente cuesta el combustible.
Pérdidas de dos euros por envase
En la actualidad, las empresas están perdiendo, dice Blanco, dos euros y pico por bombona, pues «teniendo en cuenta el precio real de la materia prima tendría que costar 20,06 euros», detalla. Esas pérdidas no se evaporan, sino que se acumulan como deuda del sistema (de los consumidores, al fin y al cabo) a las empresas. El déficit sumaba 30 millones a finales del 2013, pero al acabar febrero será casi el doble, pues en estos dos primeros meses del año, con el frío en pleno apogeo, se venden entre 12 y 14 millones de botellas.
«Es muy difícil que el déficit se pueda amortizar este año, salvo que haya un desplome de los precios en origen, lo que tampoco parece probable», señaló el director de la patronal.
Así que las subidas parecen estar aseguradas. Solo cuando se salde la deuda, el butano podría empezar a bajar, también con el límite bimestral del 5 %.
A José Luis Blanco le parece absurdo que «la bombona vaya subiendo un 5 % cada dos meses, lo más lógico es que el precio libre sea ya libre, pero se mantenga una bombona social». La asociación que representa lleva años reclamando la liberalización del sector, como hacen las eléctricas con la luz, pero conservando un precio para las familias menos pudientes.
«Mira, yo soy tan consumidor como tú. Imagina que tengo una casa de campo como segunda residencia o un bar en el que estoy quemando gas para que los señores que fuman en la terraza estén calentitos. Yo pago una bombona a 17,50, igual que un padre de familia en paro con cuatro hijos. No sé si tú lo ves justo o no, yo desde luego no. Los que lo necesiten de verdad tienen que tener una bombona social, el resto, evidentemente, tendrá que pagar 22 o 23 euros. Parte de ese precio libre irá a financiar la bombona social. Los que paguen más financiarán a los que tienen menos», resume Blanco.
Con la nueva fórmula, el butano sumará un aumento del 34 % en un año