Condenan a dos meses de cárcel a un silledense por maltratar un gato

P. V. LALÍN / LA VOZ

LALÍN

La condena es insuficiente para Lucía García, con su abogada en la foto.
La condena es insuficiente para Lucía García, con su abogada en la foto.

La sentencia del juzgado número 1 de Lalín también lo inhabilita para ejercer profesión, oficio o comercio relacionado con animales por 8 meses

22 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Una sentencia, emitida ayer por la titular del Juzgado número 1 de Lalín, condena a un vecino de Silleda, José Cidre Tato, como autor con responsabilidad penal de un delito de malos tratos contra los animales, con dos meses de prisión con la pena accesoria de inhabilitación especial para el ejercicio de derecho de sufragio pasivo por ese mismo tiempo.

En cuanto a la pena de prisión , el condenado no tendrá que cumplirla en la cárcel habida cuenta de que la legislación la sustituye por dos meses de trabajo en beneficio de la comunidad.

La sentencia también lo condena a la pena de inhabilitación especial para el ejercicio de profesión, oficio o comercio relacionado con los animales por un período de tiempo de ocho meses. También deberá asumir las costas, que quedaron fijadas en una cuantía de 500 euros.

El condenado deberá abonar asimismo, en concepto de responsabilidad civil por gasto veterinario, a Lucía García Pérez, la propietaria del gato maltratado, la cantidad de 935,49 euros y los intereses.

La pena de prisión que solicitaba la fiscalía era de tres meses de cárcel pero al aceptar los términos de la acusación fiscal el acusado se beneficia de un tercio de reducción de condena y se queda en dos meses.

La condena está alejada de la pretensión de la denunciante que solicitaba año y medio de prisión y quedó descontenta de la resolución final considerándola insuficiente. La sentencia es firme al decidir las partes no recurrirla.

«Golpeouno reiteradamente cun pau con pleno desprezo pola vida»

Lo hechos probados sitúan al condenado, sin antecedentes penales, el día 14 de mayo de este año en la calle Pintor Colmeiro de Silleda y «actuando con pleno desprezo pola vida dos animais, golpeou cun pau un gato de cor branco e negro que pertencía a Lucía García Pérez».

Sigue señalando la sentencia como hechos probados que a consecuencia de los golpes el gato sufrió una fractura de la tibia de una pata trasera, el encharcamiento de un pulmón y heridas por todo el cuerpo. Detalla el coste veterinario en la curación del gato en 935,49 euros, que debe asumir el condenado. La propietaria del animal había presentado denuncia ante la Guardia Civil, que la trasladó al juzgado