Consenso en la Colón para ampliar el horario de carga y descarga

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

LALÍN

El gobierno local estudia medidas para dotar de más vida el centro de Lalín

31 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La convocatoria del alcalde, Rafael Cuíña, a los comerciantes y hosteleros de la rúa Colón obtuvo ayer una gran respuesta. La mayoría de los industriales de la zona, incluidos los de las galerías próximas a este enclave, se dieron cita en la calle. El objetivo era aclarar posturas y llegar a acuerdos tras las medidas adoptadas para evitar el paso de vehículos que se colocaban con frecuencia aún siendo una calle peatonal. El regidor y el teniente alcalde, Nicolás González Casares, atendieron ayer la petición de los comerciantes y acordaron ampliar por la tarde una hora el horario de carga y descarga, que queda de 16.00 a 19.00 horas. Explicaron que, tras las fiestas, dada que estas fechas veraniegas son de mucha actividad, se colocarán bolardos retráctiles. Uno a la altura del cerdo en el inicio de la calle y otros dos en el arranque de la Praza da Igrexa de subida, a la altura de la pastelería Dulces Encantados.

La posición habitual será bajados, pero se subirán los fines de semana, desde el sábado por la tarde hasta el domingo por la noche y a diario tras la hora de carga y descarga. La idea es facilitar el paso de transeúntes y mejorar la seguridad en la calle. Cada establecimiento dispondrá de un mando que les permitirá, en caso de necesidad, bajarlos puntualmente.

Los representantes del gobierno local atendieron las dudas y preguntas de los asistentes y manifestaron que la Policía Local será flexible con los horarios de carga y descarga, pero pidió responsabilidad a los industriales.

Los taxistas mostraron su preocupación por un posible cambio de ubicación de la parada y Cuíña se comprometió a no adoptar ninguna medida que no fuera de acuerdo con los profesionales del sector y González Casares recordó las medidas adoptadas ya para suprimir las paradas ilegales de autocares. Cuíña apuntó que estaban barajando alguna otra opción para la parada, pero que mantendría las reuniones que hiciesen falta con el colectivo y que «non se vai a impoñer nada» y que de momento no habrá cambios.

El alcalde señaló que estaban estudiando otras medidas destinadas a dotar de vida el centro del pueblo que espera «esté irrecoñecible en catro anos». Habló de la posibilidad de colocar una zona de carga y descarga permanente próxima a la calle y de los flujos de personas que traerá consigo la apertura de la nueva biblioteca en el antiguo consistorio.