Los burros despiertan pasiones en Lalín

Javier Benito
j. benito LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

El paseo humorístico se convirtió en polo de atracción de público en As Dores, sin producirse ningún problema tras las quejas por posible maltrato

24 sep 2014 . Actualizado a las 06:00 h.

La controversia suscitada semanas antes pudo servir de catalizador para convertir el paseo humorístico de burros como uno de los actos más concurridos de público en las fiestas de As Dores. Las protestas previas por el posible maltrato a los animales en una competición de estas características quedó difuminada, a la mínima expresión de alguna queja puntual. Como se insistió desde la organización y se constató ayer, se trataba tan solo de recorrer -en muchos casos disfrazados con camisetas con mensajes humorísticos- algunas de las calles más céntricas de Lalín.

La expectación despertada, desfilaron trece burros, llenó la Praza da Igrexa y el circuito por el centro urbano. El mismo que hace veintinueve años, la última vez de esta celebración lúdica, como recordaba al finalizar el paseo uno de sus principales organizadores, Manuel Villanueva.

La Praza da Igrexa fue punto de partida y llegada para la comitiva de asnos y sus jinetes. No faltaron entre los disfraces quien se convirtió en Superman, Mario Bross o militar de pega. Otros optaron por un lema con humor en sus camisetas: «Eu son o burro» y hubo quien se engastó un poncho y sombre mexicano. Y aunque no era competitivo el paseo, había burros más o menos rápidos -el peso del jinete seguro que contó- y orden de llegada. El título honorífico de ganador sin premio se fue para Uxío Pena, un chaval de nueve años.

En esta recuperada iniciativa tampoco faltó como antaño el reparto de caramelos entre los niños y que pudieran subirse en algún ejemplar. Cincuenta kilos endulzaron los paladares en una tarde de risas y rebuznos.