El Deportivo de La Coruña arranca con un triunfo de mucho mérito en Las Palmas

El Deportivo vuelve de Las Palmas con tres puntos y un mensaje para la esperanza. Por encima del resultado y del juego, el equipo coruñés mandó un recado, más de consumo interno que de cara a los rivales, de refuerzo en la autoestima de la plantilla y de la afición. Triunfó en un campo complicado ante un Las Palmas presupuestado para el ascenso en los pronósticos. Un cabezazo de Insua le dio al Dépor la victoria y el premio a su sudor, con el que compensó los déficits de una de las pretemporadas más tumultuosas de la historia del club herculino.

Valió el cabezazo de Insua a córner lanzado por Culio en el segundo tiempo, ayudado también por la salida a destiempo de un Barbosa que había salvado a Las Palmas en el primer tiempo. El Deportivo de La Coruña, lastrado en la pretemporada por la incertidumbre de la confección definitiva de la plantilla, fue un equipo en Gran Canaria y eso es lo mejor que se puede decir de él a estas alturas. Supo defender con línea de 4 cuando había ensayado a la de 5. Tuvo llegada por bandas con interiores a pierna cambiada. Convirtió al portero rival en el mejor del encuentro y no pasó excesivos problemas para mantener su ventaja aun con inferioridad tras la expulsión de Culio.

Kaká e Insua se hicieron gigantes para aguantar la ventaja ante un Las Palmas que comenzó mejor pero se vino abajo con el paso de los minutos. Comenzó punzante con Valerón a espaldas de los mediocentros coruñeses y con la banda de Manuel Pablo (lateral izquierdo en su vuelta a casa) en el punto de mira. Remataron Tato y Máyor pero Lux respondió bien. Le costó al Dépor entrar en juego y encontrar caminos en ataque, aislado un Luis muy trabajador en la presión y encomendado al juego de espaldas. Pero se animaron Culio y Bruno Gama, y sobre todo Arizmendi, que con su despliegue físico y sus diagonales hacia el centro creó problemas. Buscó el abrigo de su pierna izquierda ante un rocoso Atouba, un portento físico cuya lesión a la media hora facilitó algo las cosas al delantero. Remató con peligro el madrileño y Barbosa se convirtió en clave. También ante un chut raso de Bruno Gama. Y Luis tuvo el gol en sus botas pero su control defectuoso estropeó un pase excepcional de Culio.

El empate al descanso dejaba buenas sensaciones. Cuando Insua desniveló (tras un córner que no era y que provocó quejas locales), el Dépor añadió retazos al esbozo de equipo. Surgió entonces la clase de Juan Domínguez para manejar los tiempos con la pelota y hacer que el equipo no sufriese ni con la expulsión de un Culio excesivamente metido en su papel de villano para la grada rival. Para entonces Las Palmas era menos, con un Valerón cada vez más alejado del área del Dépor. Estuvo más cerca de matar el partido a la contra el equipo de Fernando Vázquez, que encontró aire en los relevos de Rudy, Juan Carlos y finalmente Bicho. Sólo un remate de Tato, cuando el equipo canario también se había quedado con 10, provocó cierta taquicardia en el Dépor, que se refuerza con un triunfo de mucho mérito y trabajo, que ilusiona por igual que el margen de mejora que aún tiene el equipo coruñés.

0 - Las Palmas: Barbosa; Aythami Álvarez (Galán, m.76), Deivid, David García, Atouba (Xabi Castillo, m.31); Vicente Gómez; Nauzet Alemán, Valerón, Momo; Tato y Máyor (Delev, m.58).

1 - Deportivo: Lux; Laure, Kaká, Insua, Manuel Pablo; Álex Bergantiños, Juan Domínguez; Bruno Gama (Bicho, m.88), Culio, Arizmendi (Juan Carlos, m.81); y Luis Fernández (Rudy, m.76).

Gol: 0-1, M.50: Insua.

Árbitro: Jorge Figueroa Vázquez (Comité Andaluz). Expulsó por doble amonestación al jugador local Xabi Castillo (minutos 52 y 85), y al visitante Culio (minutos 28 y 63). Además, amonestó a Tato, Momo, Delev y David García, todos ellos de Las Palmas.

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