Seguro que los guionistas Salvador Paskowitz y J. Mills Goodloe no se habrán retirado con la venta de su guion a las tres productoras independientes que comparten El secreto de Adaline, pero seguro que tendrían un best seller de haberlo convertido en libro, de esos de tapas acharoladas para vender en supermercados y grandes superficies gracias a un agente espabilado. Ahí sí que se habrían forrado. Porque lo mucho de inverosímil que tiene su historia habría funcionado a la perfección, sin menosprecio al trabajo de su joven director, Lee Toland Kriege, de filmografía corta a sus 32 años, pero con acreditado oficio considerando el impecable acabado del filme. Es sobre todo una historia de amor en clave fantástica, que si no acaba de cuajar es porque se conforma con centrarse en la peripecia de Adeline, esa mujer nacida a comienzos del siglo XX, y a la que un trágico accidente que da con su coche en el fondo de un rio, sumado a una confluencia de fenómenos atmosféricos, la dota del don de la eterna juventud. Se queda en los 29 durante varias décadas y la trama lo presenta como una fatalidad, recurso asumible en la ficción, que a fin de cuentas no es más que una película.
¿Funciona? Por partes? Blake Lively es un bellezón de incuestionable fotogenia, que se esfuerza en hacer creíble a su personaje. Es testigo privilegiada del siglo XX, pero está condenada a huir permanentemente, de sí misma y de los demás a riesgo de ser tomada por un espécimen y como tal confinada para su estudio. La idea funciona a ese nivel y por momentos compartimos su angustia. También luce el acabado de atmósfera, muy trabajado en dirección de Arte y en posproducción, que se hace cómplice del tono de la historia y deriva en agradable. En ese sentido es un made in Hollywood canónico. Falla en su limitada capacidad para emocionar, pues aunque engancha en cuanto a ritmo, no acabamos de meternos en la piel de la protagonista hasta el extremo de encogernos el corazón. Está también el protagonismo de la cámara con el recurso a picados y otros varios que te acaban sacando de la trama, invitándote a que emitas una exclamación en plan qué virguería? Por último, destacar lo bien que están Ford y Burstyn, secundarios de lujo bien ajustados a sus papeles.
Ficha técnica
«EL SECRETO DE ADALINE». EE. UU., 2015. Director: Lee Toland Kriege. Intérpretes: Blake Lively, Michiel Huisman, Harrison Ford, Ellen Burstyn, Kathy Baker. Drama romántico. 112 minutos.