Siete barcos de Lorbé dejan el puerto por la falta de seguridad en las instalaciones

m. b. oleiros / la voz

OLEIROS

06 feb 2016 . Actualizado a las 13:59 h.

El aviso de alerta naranja en el mar previsto para este fin de semana puso ayer en fuga a la mayoría de los barcos del puerto de Lorbé en busca de un amarre seguro. Las instalaciones portuarias de Oleiros no lo son desde hace dos años, cuando los fuertes temporales que se sucedieron en invierno dañaron el tren de fondeo, que sigue sin ser reparado pese a las reiteradas peticiones de la Cofradía de Pescadores de Lorbé a Portos de Galicia, responsable de las instalaciones.

«Xa non se pode estar alí, porque os barcos chocan entre si», denuncia el patrón mayor del pósito oleirense, Emilio Méndez, que optó por el puerto de Oza, como otros cuatro patrones de Lorbé, para dejar su barco hasta que las condiciones en el mar mejoren. Otros dos barcos del puerto oleirense están amarrados en Sada y los tres restantes seguirán en las instalaciones de Oleiros, pero sin amarrar al tren dañado. «Amarrarán en boias, por aí, fóra do fondeo, abandonados pola man de Portos de Galicia», denuncia Méndez.

Los marineros esperan poder regresar a sus amarres a mediados de la próxima semana, pero reclama una vez más que la administración autonómica ejecute por fin las actuaciones que se comprometió a llevar a cabo cuando el mar azotó la costa gallega durante semanas, y muelles, paseos marítimas y playas resultaron gravemente dañados.

El pósito oleirense ha mantenido hasta ahora cuatro reuniones con Portos en las que le trasladaron las principales necesidades de las instalaciones de Lorbé, y denuncia que solo le han cambiado una bombilla.