El nuevo edil de Facenda, Jaime López Lisnier, admitió durante el pleno que se celebró ayer en Cambre que los presupuestos del 2010 se podrán llevar a la sesión plenaria del próximo mes de febrero. La afirmación fue recogida con sorpresa y escepticismo por parte del PP, que se mostró especialmente crítico con las respuestas que la corporación municipal les ofrecía.
La sorpresa de la tarde llegó cuando el BNG planteó la moción sobre el decreto de la Xunta y no pudo debatirse al no haber mayoría absoluta de votos en la corporación. La ausencia de la concejal Beatriz Ramos y del portavoz de Izquierda Unida, Luis Miguel Taibo, impidió que se llegase a once votos. El edil nacionalista Xabier Iglesias se mostró indignado con la actitud del portavoz del Partido Galeguista, Manuel Marante, al votar en contra. En cuanto al tema de la contratación de la auditoría externa, el alcalde, Antonio Varela, afirmó que el Colegio de Economistas respondió negativamente y que habría que buscar dos equipos de expertos para encontrar una solución.