El argentino, que volvía a la titularidad, podría estar 6 semanas de baja por una lesión en el gemelo
27 sep 2014 . Actualizado a las 17:22 h.Augusto Fernández regresó ayer al once del Celta con poca fortuna. El argentino se lesionó en el minuto 21 de partido en una acción en solitario y no pudo continuar en el terreno de juego. Las primeras pruebas practicadas al futbolista apuntan a una lesión muscular en el gemelo interno de su pierna derecha compatible con una rotura fibrilar, aunque este diagnóstico deberá ser confirmado en las próximas horas. De corroborarse el diagnóstico, el período de baja aproximado sería de seis semanas.
Fueron veintiuno los minutos que aguantó Augusto Fernández sobre el césped del Martínez Valero. Fue entonces cuando en un avance por la banda izquierda, y en un intento por deshacerse de un defensa rival, Augusto hizo un gesto extraño en su pierna y notó molestias en la rodilla derecha. Al momento se dejó caer sobre el césped con claros gestos de contrariedad y preocupación en el rostro. Quizás temiéndose lo peor.
Fueron los servicios médicos celestes los que antes de la medianoche hicieron público el diagnóstico inicial del jugador, que de entrada tendrá por delante más de un mes en dique seco.
La temporada se está presentando muy cuesta arriba para el argentino. Llegó a Vigo con la pretemporada iniciada, y con la intención de recuperar el pulso a marchas forzadas. Sin embargo, una rotura fibrilar que sufrió el cinco de septiembre, mientras disputaba un amistoso ante Alemania le hizo parar. Esta lesión obligó al delantero celeste a estar tres semanas alejado del terreno de juego, regresando a la convocatoria el pasado martes frente al Deportivo.
Mas lesiones
Pero la lesión del atacante argentino, no es el único precio que el Celta tuvo que pagar para llevarse los tres puntos del Martínez Valero. También Andreu Fontás sufrió una herida en su ceja derecha que requirió cinco puntos de sutura. La brecha se produjo a causa de uno de los codazos que Jonhatas propinó al defensa celeste durante el encuentro y que le valió la tarjeta amarilla al delantero local. Tras una rápida cura, Fontás volvió con la cabeza vendada al terreno de juego, como ya hizo Radoja en el partido ante el Deportivo.
Los dos célticos no fueron los únicos damnificados durante el partido, puesto que Gustavo Cabral recibió una patada en el lanzamiento a puerta de Jonhatas, que detuvo Sergio, en la jugada anterior al gol de Nolito.