El Puerto de Vilagarcía nombrará un coordinador para posibles alertas de ébola

s. luaña / s. gonzález Data / agencia VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Los oficiales de la Royal Navy pasaron en el 2001 por una esterilla a causa de la fiebre aftosa.
Los oficiales de la Royal Navy pasaron en el 2001 por una esterilla a causa de la fiebre aftosa. vítor mejuto< / span>

La posibilidad de que desembarque un afectado es muy remota, ya que pocos barcos llegan directamente de África

15 oct 2014 . Actualizado a las 04:58 h.

El Puerto de Vilagarcía deberá designar a un coordinador para posibles alertas por ébola. No se trata de que haya un peligro real de que pueda llegar una persona infectada a la ría, sino que únicamente se pone en marcha el protocolo al que obliga el Ministerio de Fomento y que se tiene que aplicar en todos los puertos de interés general y en los que reciban tráficos procedentes de África.

De momento, no está previsto que se tomen otras medidas complementarias o que se vayan a hacer controles en la rada arousana, a pesar de que los barcos que llegan con mercancías de África son la puerta de entrada directa de ciudadanos del continente desde el que empezó a propagarse una enfermedad que hasta ahora no preocupó en Europa.

Controles en otros puertos

Pero la mayoría de los barcos que llegan al Puerto de Vilagarcía procedentes de África, casi siempre con madera u otro tipo de mercancía general, pasan antes por otros puertos españoles, generalmente por Canarias. Por lo tanto, en caso de tener que hacerse controles, sería en esas radas en las que se llevasen a cabo medidas más estrictas para evitar la entrada de ninguna persona afectada por la enfermedad que ya provocó la muerte de dos misioneros españoles y mantiene en estado crítico a la enfermera Teresa Romero.

En todo caso, no sería la primera vez que el Puerto de Vilagarcía tiene que poner en marcha medidas especiales por alertas sanitarias. Como ocurrió en el año 2001, cuando la fiebre aftosa supuso una grave amenaza para el ganado del Reino Unido. Entonces, la Royal Navy hizo una de sus habituales visitas a Vilagarcía. Las buenas relaciones que datan de los años en los que hacían maniobras en la ría no evitaron que los oficiales, al bajar del barco, tuviesen que pasar por una esterilla esterilizada que se había colocado como medida de prevención. Los marinos ingleses ni se inmutaron.

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