Jacobo Rey: «El debut en ACB fue como dar un salto de veinte años»

Manuel García Reigosa
M. G. REIGOSA SANTIAGO / LA VOZ

ANDAR MIUDIÑO

PACO RODRÍGUEZ

Desde 2010 recupera en un blog la historia del Obradoiro

29 nov 2017 . Actualizado a las 10:49 h.

Si alguna vez hay un trivial sobre el Obradoiro, jugar contra Jacobo Rey será perder el tiempo. Tiene una memoria prodigiosa y nadie ha buceado en la historia del club como él, con la sola intención de recuperarla. Responde de inmediato a cuestiones como la mejor racha de victorias seguidas en la ACB («seis, en la temporada de Muscala y Oriol, la rompió el Real Madrid en Sar»), quién ha repartido más asistencias («Rafa Luz») o quién ha capturado más rebotes («Levon Kendall»).

Otro botón de muestra es el recuerdo que rescata como el momento de más carga emotiva, al echar la vista atrás: «El primer partido del Obra en la ACB, contra el Barcelona, fue increíble, después de tantos años esperando. Era como dar un salto de veinte años de un día para otro. Y, además, el Barça, que acabó siendo campeón de Europa, con Ricky Rubio, Lakovic, Sada, Mickeal, Norris, el Navarro de hace diez años, Fran Vázquez, N’Dong, Lorbek... Fue increíble. Aquel O-B-R-A todos xuntos Obrá ya se cantaba en Santa Isabel en el 89».

El primer partido en Santa Isabel

Fue en esa campaña, precisamente, cuando asistió por vez primera a un partido del conjunto santiagués. «Iba con mis padres. Retirábamos el carné de socios en el vídeo club de la galerías del Araguaney. Aquello me gustó desde el principio», comenta. «Era el equipo de Collins, Anger... La temporada pasada se había salvado por poco. Empezó bien y...». Y acabó con el célebre play off que tardó casi dos décadas en resolverse en los tribunales.

«Creo que no hay ningún caso que se le parezca -comenta-. El club no desapareció gracias a quienes fueron capaces de sostenerlo durante tanto tiempo, con el convencimiento de que había opciones de volver».

Fueron dos décadas de paréntesis. «Me queda la espina de no haber estado en los años duros», admite. No lo tenía fácil, porque era un niño cuando empezó esa travesía de la supervivencia.

Se reenganchó en el 2009, con el salto a la ACB. Y hasta hoy, con la particularidad de que en el año 2010 empezó con el blog «elobratienehistoria». Porque había una historia que contar, anterior a la larga espera con final feliz.

«Igual que yo iba con mis padres, me encontré en 2009 y 2010 con padres que llevaban a sus hijos. El club aguantó gracias a la gente que lo mantuvo vivo. Pero hubo una desconexión. Es como si no hubiese referentes, como si no hubiese un antes del 2009». Y con la idea de recuperarlo empezó con el blog.

Ha pasado más de un lustro y puede decir que ha conseguido su propósito con creces. En ocasiones, incluso para su propia sorpresa: «Empecé una serie sobre los americanos que vistieron esta camiseta. Creía que el primero había sido Chuck Verdeber, en el 82, en División de Honor, porque la normativa no permitía entonces que jugasen en otras categorías. Tonecho me advirtió de que no, que del 74 al 77 sí podían jugar».

Stoczynski, el primer americano

A partir de ahí, empezó el rastreo, que dio sus frutos: «El primer americano fue Dave Stoczynski. Conseguí su correo electrónico y me contestó. Flipaba con que alguien se acordase de aquella etapa, en el pabellón universitario y en el viejo Sar, y viendo lo que es el equipo ahora».

Otras veces las noticias no fueron tan agradables: «Bill Collins es el único americano que estuvo más de una temporada en el Obradoiro. Dejó una gran huella en Santiago. Se tuvo que ir repentinamente, por enfermedad de su madre. Incluso dejó aquí un Mercedes enorme que había traído de su época en Italia. El club no sabía que hacer con él. Al final acabó en una chatarrería».

Pocos días después de la entrada en el blog para recordar la etapa compostelana de Bill Collins le llegó un correo desde Boston, con un enlace a un periódico local de una información que se hacía eco del fallecimiento del pívot, uno de los mejores en la historia del Obra. De esa historia que Jacobo Rey no deja de rescatar y que le lleva también a intentar recuperar datos sobre todos los partidos que ha disputado el club. «Me faltan algunos de los noventa», concluye.

Ocho, nueve o diez victorias

Como aficionado, Jacobo no cierra los ojos al sueño de la Copa, si bien reconoce que «da un poco de miedo pensar en ello». De nuevo saca brillo a su memoria para recordar la historia reciente y las dos veces en las que el equipo se quedó a las puertas de la clasificación: «El primer año en la ACB con ocho hubiera sido suficiente. Recuerdo el último partido de la primera vuelta en la pista del Estudiantes. De haber ganado...». En el curso 12/13 «no llegó con nueve victorias. En el triple empate con el Barcelona y el Estudiantes salimos perdiendo por el basketaverage». Y echando la vista sobre esta campaña, aventura que «probablemente haya que ganar diez partidos, tal y como está yendo el campeonato».

El error de la fecha de fundación

Este año el Obradoiro juega en la lotería de Navidad al número 51070, que hace referencia a la fecha de nacimiento del club, el 5 de octubre de 1970. Las introspecciones históricas para elaborar el blog permitieron corregir el dato, tal y como explica el propio Jacobo Rey: «Durante mucho tiempo se comentaba que el club había sido fundado un lunes 6 de octubre de 1970. Hablando sobre ello, nos dimos cuenta, al consultar el calendario de aquel año, de que había un error, porque el lunes era el 5, no el 6». El debut en la ACB también remite a un mes de octubre, el del año 2009, en el que el Obradoiro recibió al Barcelona en un Multiusos de Sar abarrotado.