Cuatro asociaciones romaníes han presentado denuncias porque la relación incluye datos personales
08 oct 2010 . Actualizado a las 02:27 h.La Gendarmería francesa tiene un fichero ilegal para controlar a los gitanos extranjeros y franceses. Cuatro asociaciones han presentado denuncias porque en él se recogen datos de carácter personal, incluido el origen étnico, un delito que la ley castiga con cinco años de prisión y 300.000 euros de multa.
Se llama MENS, siglas que corresponden a Minorías Étnicas No Sedentarias. Las asociaciones descubrieron su existencia casi por casualidad, al encontrar en Internet el resumen de un coloquio en el que un jefe de escuadrón habló de más e incluyó una «genealogía de las familias gitanas»: pinchando un mapa de Francia, el comandante hacía aparecer región por región los nombres de las familias nómadas y su especialidad : fraude, robo de joyas, tráfico de coches robados?
El Ministerio del Interior francés asegura desconocer su existencia; la Gendarmería, también. Pero documentos internos citados por el diario Le Monde contradicen la versión oficial.
Interrogado en Luxemburgo, el ministro del Interior, Brice Hortefeux, anunció que ha encargado una investigación interna sobre el asunto. Su jefe de gabinete, Michel Bart, deberá comparecer en noviembre ante la justicia tras ser acusado de incitar al odio racial por una circular en la que ordenaba desalojar preferentemente los campamentos gitanos.
Alusión a deportaciones nazis
El grupo de control y organización de bases de datos que preside el criminólogo Alain Bauer intentará aclarar las cosas, consciente de que «muchas de estas instituciones mienten con aplomo». Bauer asegura que «no será el primer fichero no declarado que descubrimos». Las asociaciones que han presentado las denuncias esperan una reacción pública «para que esto acabe pronto», porque «no estamos en 1940», en una nueva alusión a las deportaciones nazis.
Observado con lupa desde Bruselas por su política de expulsión de gitanos rumanos y búlgaros, el Gobierno galo solo consiguió ayer el apoyo del Grupo Popular Europeo en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, en Estrasburgo. La izquierda y los conservadores británicos denunciaron la política de Francia e Italia y su estigmatización de los doce millones de ciudadanos de esa etnia que viven en la Unión Europea, escudándose en los problemas de seguridad que generan.
Viaje al Vaticano
Nicolas Sarkozy, inspirador directo de la política de expulsiones, viaja hoy al Vaticano en un intento de recomponer las maltrechas relaciones que lo enfrentan desde el verano a los obispos franceses. También Benedicto XVI aludió en agosto al deber de los franceses de acoger a los seres humanos, independientemente de su origen étnico.