«En la cárcel me introdujeron un bastón por el ano que me reventó los intestinos y tuve que ser operado»

La Voz

INTERNACIONAL

05 mar 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

El psicólogo y periodista Guillermo Fariñas fue encarcelado en tres ocasiones por su oposición al régimen cubano. Cuenta que la primera vez que lo sometieron a torturas fue una madrugada que lo sacaron de la celda esposado de brazos y piernas, lo ataron en el exterior a una cerca, y le echaron cubos de agua fría y le propinaron golpes de todo tipo para que gritara consignas a favor del Gobierno cubano.

«Cuando vieron que era imposible, me introdujeron un bastón por el ano que me reventó los intestinos y tuve que ser operado de urgencia». Esto fue en la prisión de Valle Grande, en 1996, cerca de La Habana, recuerda.

En otras ocasiones, las torturas se repitieron, «porque cuando no eres de los [opositores] muy conocidos, indiscutiblemente los oficiales se ensañan contigo para que cooperes para ser un delator». Y concluye: «Es el modo vivendi de las prisiones cubanas, que son auténticos campos de concentración nazi, se lo aseguro yo, que estuve en ellas tres veces».

Las secuelas de esas estancias perduran. El doctor Ismelis Iglesias Martínez relata que ha pasado por dos operaciones de hemotórax, sufre polineuropatía nutricional, que deriva en atrofias musculares y alopecia, entre otras.