El hijo de Karrubi denuncia que su padre está en una situación de «cuasi arresto domiciliario»
30 dic 2009 . Actualizado a las 02:00 h.Las autoridades iraníes no están dispuestas a aflojar la mano con la oposición. En un nuevo pulso a todos aquellos que cuestionen el liderazgo de Mahmud Ahmadineyad, ayer continuaron las detenciones de personalidades críticas con el régimen. Entre ellas destaca la de Nushin Ebadi, hermana de la premio Nobel Shirin Ebadi. Cuatro agentes de la policía secreta se la llevaron de su domicilio de madrugada, según denunció la defensora de los derechos humanos. Las fuerzas de seguridad también arrestaron a dos familiares del líder opositor Mir Huseín Musavi.
Ebadi, que ganó el Nobel de la Paz en 2003 por su trabajo en el campo de los derechos humanos, aseguró que la detención de su hermana era un castigo contra ella por sus actividades. Estas actividades constituyen un verdadero dolor de cabeza para las autoridades de la República Islámica, que vieron el galardón con recelo. Desde la víspera de las elecciones del pasado junio se encuentra fuera del país.
«Es muy normal. Ellos saben que las pequeñas cosas son las que más daño pueden hacer a las personas», explica Amir, un joven microbiólogo crítico con el Gobierno. «Si se llevan a tu padre o a tu hijo, tienen controlada a una gran cantidad de gente que tendrá miedo de hacer o decir nada pensando en su seguridad», relata. «Además, como tienen el poder, no les importa nada lo que pase. Siempre creen que la razón está de su lado porque les viene por inspiración divina», concluye.
Un hijo del dirigente opositor Mehdi Karrubi denunció, por su parte, que las autoridades han retirado los guardaespaldas oficiales asignados a su padre. Taghi Karrubi aseguró que la medida parece encaminada a que no pueda salir a la calle con seguridad, y la calificó de «cuasi arresto domiciliario». Otro hijo, este de Ibrahim Yazid, declaró que el arresto de su padre no detendrá los esfuerzos en favor de la democracia en su país. «El Gobierno está usando el terror y la intimidación, pero la clave es no dejar que eso frene el ritmo de nadie», agregó.
Las nuevas detenciones se suman a la creciente tensión con Occidente, que amenaza con imponer sanciones a Irán por su programa nuclear. Las páginas web de la oposición informaron ayer de la detención del cuñado de Musavi y su esposa, la periodista Badrolsadaat Mofidí. Mofidí y otro de los detenidos, Mashallah Shamsolvaezin, están al frente de la Asociación de Periodistas.