Israel acuerda un frágil alto el fuego por diez días y Hamás lo rechaza

Laura L. Caro

INTERNACIONAL

18 ene 2009 . Actualizado a las 12:29 h.

Israel acordó ayer un alto el fuego unilateral en la franja de Gaza a la una de la madrugada de hoy, sin haber cumplido su objetivo de acabar con el disparo de cohetes palestinos a su territorio, pero Hamás ya advirtió que no lo acepta.

El primer ministro, Ehud Olmert, anunció que sus tropas no atacarán en los próximos 10 días para dar oportunidad a un posible acuerdo sobre un alto el fuego mutuo y duradero, a imagen de lo que reclama la propuesta de paz franco-egipcia.

También anunció que sus soldados se quedarán en la franja, responderán a cualquier ataque y no se abrirán los pasos fronterizos hasta que el contrabando de armas a Gaza esté resuelto. Israel introdujo en la agenda para un futuro fin definitivo de su ofensiva la exigencia de que Hamás fije un calendario y reduzca sus demandas para liberar al soldado Gilad Shalit, capturado en Gaza en junio del 2006.

Hamás rechazó por primera vez desde Gaza la tregua unilateral. «Nunca aceptaremos la presencia de ningún soldado en Gaza, cualquiera que sea el precio», dijo Fauzi Barhum, portavoz del movimiento. Añadió que «la propuesta del enemigo para un alto el fuego unilateral significa que la guerra de Gaza fue unilateral y llevada a cabo contra nuestro pueblo». Antes, desde el Líbano, Osama Hamdán, dijo que la lucha continuará mientras perdure la ocupación.

«Cuatro bombas de fósforo»

Horas antes de decidir el alto el fuego unilateral, Israel continuó con sus bombardeos en la franja de Gaza, matando a una decena de personas, incluidos una mujer y dos niños que se habían refugiado en una escuela de Beit Lahia gestionada por la ONU. En el ataque fueron heridas catorce personas, incluida la madre de los niños. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó «en los términos más duros» el bombardeo y lo calificó de inadmisible.

Ese fue al menos el cuarto ataque israelí contra un centro escolar de la Agencia de la ONU de Ayuda a los Refugiados Palestinos (UNRWA).

«Esto demuestra una vez más que no hay ningún lugar seguro en Gaza, ni siquiera una instalación de la ONU; es una tragedia», afirmó el portavoz de la agencia, Christopher Gunness.

«Se cree que han caído cuatro bombas de fósforo blanco, dos dentro del patio de la escuela, una que ha alcanzado una de las paredes y otra que impactó a veinte metros del centro educativo», indicó Francesc Claret, también empleado de las Naciones Unidas.

Evacuación bajo las bombas

Agregó que en el colegio se refugiaban unas 1.600 personas y que cuando eran evacuadas «otra bomba impactó en el tercer piso».

El ataque «se produce después de las disculpas del pasado jueves, cuando se nos aseguró que no se volverían a repetir incidentes como el bombardeo contra la sede central de la UNRWA en la capital», denunció Claret, en alusión al bombardeo durante la visita de Ban a Israel.

Otros tres palestinos perecieron ayer al nordeste de la ciudad de Gaza por los disparos de barcos de guerra israelíes contra unas viviendas, cerca del campo de refugiados de A-Shati.

Milicianos palestinos dispararon ayer al menos nueve cohetes y cuatro proyectiles de mortero contra suelo israelí, que no causaron daños personales.

Con los de ayer, ya son 1.203 los palestinos muertos desde el inicio de la guerra, el 27 de diciembre, la mitad de ellos civiles. Del lado israelí perecieron cuatro por proyectiles palestinos.