La organización terrorista Al Qaida «está esencialmente derrotada en Irak y en Arabia Saudí» y a la defensiva en el resto del mundo, incluidos sus reductos en la frontera de Afganistán y Pakistán, según el director de la CIA, Michael Hayden.
En una entrevista que publicó ayer el diario The Washington Post , el director de la Agencia Central de Inteligencia se refirió a «grandes avances contra los aliados de Al Qaida en el Oriente Medio y una campaña cada vez más exitosa para desestabilizar a los cabecillas del grupo». Advierte de que esa red terrorista es «una amenaza grave», pero añadió que Osama Bin Laden pierde «la batalla por los corazones y las mentes en el mundo islámico y ha perdido en gran medida su capacidad para explotar la guerra de Irak en el reclutamiento de militantes». Dos años atrás, un informe de la CIA había concluido que la campaña de EE.?UU. en Irak había favorecido la propaganda de la red y había generado donaciones de dinero y legiones de voluntarios.
«En un balance general, ahora estamos en una situación mucho mejor», dijo Hayden al diario. Entre los logros menciona «la casi derrota estratégica de Al Qaida en Irak, la casi derrota estratégica en Arabia Saudí, retrocesos significativos globalmente». Según el Post , «la sensación de que ha cambiado el balance en la lucha contra el terrorismo la comparten numerosos expertos, aunque algunos advierten que es demasiado pronto para decir si esos avances son permanentes».
Pero la red de Bin Laden no es el único enemigo de Washington en Irak. Miles de chiíes seguidores del clérigo Moqtada al Sadr salieron ayer a las calles de Bagdad y de varias ciudades del sur en protesta por las negociaciones del Gobierno con EE.?UU. para regularizar la presencia militar estadounidense en Irak.
Washington y Bagdad estudian un acuerdo para determinar la naturaleza de la presencia militar, al expirar el mandato dado por la ONU a final de año.