El Rey se enfrenta a Hugo Chávez después de que llamara fascista a Aznar

Efe

INTERNACIONAL

«¿Por qué no te callas?», le espetó Don Juan Carlos al presidente venezolano. Tras el altercado, el monarca abandonó la clausura de la Cumbre Iberoamericana.

01 dic 2007 . Actualizado a las 03:06 h.

El Rey Juan Carlos de España, en un gesto sin precedentes, abandonó hoy el Plenario de la XVII Cumbre Iberoamericana, en protesta por los ataques al ex presidente del Gobierno José María Aznar y a su país, dijeron a EFE fuentes oficiales.

Don Juan Carlos tomó esta decisión para mostrar el «desagrado de la delegación española», de acuerdo con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez- Zapatero, que se quedó en la sesión por si era necesario responder a nuevas acusaciones.

El Rey, después de permanecer durante unos minutos en un sala adyacente al plenario, optó por regresar para asistir a la ceremonia de clausura de la Cumbre, a petición de la anfitriona, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, que fue expresamente a buscarle.

Los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez, y de Nicaragua, Daniel Ortega, protagonizaron los ataques.

Pero fue la última intervención de Chávez la que provocó la reacción del Rey.

Rodríguez Zapatero había reprochado a Chávez sus ataques a Aznar, a lo que respondió el presidente venezolano apelando a su derecho a opinar, momento en el que Juan Carlos I le espetó: «¿Por qué no te callas?», mientras, enojado, le señalaba con el dedo.

Minutos después y cuando Ortega criticaba el comportamiento de la empresa española Unión Fenosa, Don Juan Carlos abandonó la sala y no estuvo presente durante la interpretación del himno chileno, con el que finalizó el debate.

Antes de ese último episodio, Hugo Chávez había atacado a Aznar, acusándole de haber apoyado el golpe en su país de abril de 2002 y calificarle de nuevo de «fascista».

Chávez, quien ayer llamó «fascista» a Aznar en las sesiones de la cumbre, insistió hoy en esas críticas, y sostuvo que, en una conversación privada le respondió «esos se jodieron» (sic) al aludir a los países más pobres del mundo.

Ante esa intervención, pidió la palabra el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, para recordar al líder venezolano que estaba en una mesa con gobiernos democráticos que representan a sus ciudadanos en una comunidad iberoamericana que tiene como principio esencial el respeto.

«Se puede estar en las antípodas de una posición ideológica y no seré yo quien esté cerca de las ideas de Aznar, pero fue elegido por los españoles y exijo ese respeto», pudo decir Zapatero mientras Chávez intentaba interrumpirle defendiendo su derecho a opinar libremente.