Vilalba disfruta de una noche de moda con un desfile de nuevos diseñadores

Mayte Corbelle

LUGO CIUDAD

Diseños atrevidos, telas vaporosas e incluso coqueteos con el cristal o con el vinilo, caracterizaron la Pasarela Jóvenes Creadores.

24 nov 2009 . Actualizado a las 22:33 h.

La primera Pasarela Jóvenes Creadores trajo esta fin de semana gente guapa, humor y ritmo a la capital chairega. Fue a lo largo de un espectáculo que duró dos horas y media y durante el cual hubo mucha moda, pero también música y coreografías de la mano de la escuela Paloma.

Así, la fiesta empezó con ritmo oriental y con el desfile de los más pequeños. Modelos locales que fueron el resultado del cásting que se celebró en la villa y que demostraron sus dotes y desparpajo sobre el escenario. Primero desfilaron con ropa de la tienda local Maymar y, después, con prendas de Taracido.

Fue el preludio de la pasarela de jóvenes creadores. Diseños atrevidos, telas vaporosas e incluso coqueteos con el cristal o con el vinilo fueron algunos de los destellos de moda que se vieron en Vilalba. La encargada de abrir el espectáculo fue la diseñadora local Tania Tengido, que con una de las colecciones más numerosas puso blanco sobre negro con un estilo que, según ella, está inspirado en sir John Soane.

Tras ella llegaron los aires renacentistas de María Abilleira y, después, Marta Magide y Martha Juliana presentaron dos modelos con seda, vinilo y cristal. Diseños que contrastaban con la otra creación de Magide, de estética dulce y cándida.

Un desfile, este de Vilalba, que también tuvo un hueco para la moda de baño. En este caso, de la mano de Covadonga Gutiérrez, que vistió a sus dos modelos con bañadores inspirados en Gaudí y en el mundo celta. Después fue el turno de Raquel Blanco, la única que usó la tela y los colores vaqueros en una colección más sport.

Así llegó la primera novia de la noche. Vino de la mano de Covadonga Gutiérrez y de Raquel Blanco. Después vendrían la de Marta Pérez, de corte más hippie y el broque final, el diseño de Leticia Novoa, de largo para la ceremonia y de corto para el banquete y la fiesta.

Además, hubo inspiración azteca y africana gracias a los modelos de los hermanos Pedro y Estefanía Orgaz. Tejidos muy ligeros que también protagonizan el diseño de Beatriz Riveiro en color crema y de lo más sugerente de la jornada. Tras él, la sofisticación de Lucía Marcote y otros diseños en conjunto, de Pérez, Marcote y Riveiro.

Todo ello, sobre unos tacones casi imposibles que, a veces, complicaron el caminar de las modelos, si bien su desparpajo y su simpatía hicieron que un pequeño tropiezo se convirtiera en uno de los aplausos más grandes de la noche. Todo, en el auditorio Carmen Estévez que casi se llenó. Una fiesta de la moda en la que estuvieron las misses de Lugo y Galicia y que sirvió de preámbulo para la nueva gala Miss y Míster Lugo, que se celebrará en ese escenario coincidiendo con la feria del capón. La organización corrió a cargo de la firma Pernas y Correa, con el apoyo del Concello.