Lugo acogió ayer por primera vez una reunión del Consello de la Xunta de Galicia. El presidente, Alberto Núñez Feijoo, quiso reunir en la ciudad amurallada a su Gobierno para anunciar el diseño de un programa para promover la inversión productiva en la provincia, y las medidas que, para el mismo fin, aplicará la Administración autonómica de manera transitoria. El programa se denomina Impulsa-Lugo y, en palabras del presidente de Galicia, es una acción de discriminación positiva. Esta iniciativa ha sido acogida con satisfacción tanto en el Ayuntamiento como en la Diputación, que sin embargo encuentran algunos flecos que aún no ven claros.
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, destacó que ayer fue la primera vez que el Consello de la Xunta se reunió en Lugo (edificio administrativo) en la historia de la autonomía. «Isto significa respaldo ás necesidades da provincia». El Consello acababa de dar luz verde al programa Impulsa-Lugo, un plan para la promoción de inversiones productivas, creación de empleo y fomento de las iniciativas emprendedoras.
Con el citado programa la Xunta pretende equilibrar la Galicia más desarrollada y la que lo está menos. «Lugo necesita discriminación positiva», dijo el presidente de la Xunta. Explicó que este programa nace a instancia de la iniciativa social, impulsada por los sindicatos CC.OO., UGT y CIG, así como por la Cámara de Comercio (se refería al llamado Plan Lugo). Dijo que espera contar también con la CEL para el desarrollo de Impulsa-Lugo. Destacó que abarca a todos los municipios de la provincia y todos con iguales oportunidades.
Anunció que el citado programa incluye un plan estratégico, para cuya elaboración se destina medio millón de euros. Uno de los objetivos será el de detectar territorios y sectores con potencial; por otro lado, diseñará estrategias para ellos, para incentivar a los emprendedores. El plan estratégico incluirá uno de evaluación y los correspondientes indicadores de seguimiento.
Seguimiento
Para el control de la evolución de Impulsa-Lugo habrá un comité de seguimiento. Lo formarán el conselleiro de Presidencia, el director xeral del Igape y el de Planificación y Fondos; la delegada territorial de la Xunta en Lugo, representantes de la asociación impulsora del Plan Lugo, el alcalde y un representante de la oficina de gestión.