Miles de personas gozan de la xira en Vilalba bajo el sol

La Voz

LUGO

30 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Hay días del año en los que algunos lugares se llenan hasta los topes y otros se quedan completamente vacíos. El de ayer fue uno de esos días en los que en Vilalba se apreció ese contraste, pues fue el primer día de la xira en A Magdalena. Buen tiempo y ganas de diversión fueron los dos factores que, sumados, dieron un resultado tan conocido como espectacular: miles de personas, de Vilalba y de otros lugares, se asentaron en el área recreativa para pasar unas horas que durarán hasta hoy.

Responsables de la Policía Local y de Protección Civil comentaron a primeras horas de la noche que la jornada estaba siendo tranquila, y aunque se mostraron prudentes sobre la comparación con otros años, sí destacaron que la afluencia de público era muy elevada. Esa misma impresión mostraban algunos asistentes, entregados al placer de la sobremesa tras una comida más larga, abundante y concurrida de lo habitual.

Empanadas, carnes, tortillas... Todo se da por bien empleado cuando llega la xira y A Magdalena se convierte en un destino turístico-festivo de fin de semana. En días pasados, como suele ser habitual, se observaron de nuevo los preparativos de jóvenes y adultos, que instalan sus mesas, sus toldos y hasta sus tiendas de campaña para que la ciudad de vacaciones que es A Magdalena en el fin de semana anterior al San Ramón esté lo más cómoda posible.

Chapuzones

Por otro lado, el buen tiempo no solo permitió disfrutar de la fiesta sin incomodidades en forma de orballo sino que a algunos les supuso una buena razón para refrescarse en el cercano río. Alguno incluso comentó, como circunstancia favorable para la xira de este año que no coincidiese con la romería de Naseiro.

La concurrida fiesta viveirense de este año ya se celebró, con lo que ni siquiera hubo problema para asistir a las dos reuniones, caracterizadas por la alta afluencia de público y por la exaltación de la buena mesa. Hoy, en A Magdalena, continúa la fiesta campestre.

Así, jóvenes y adultos tienen de nuevo una cita con la comida, sabiendo que además el próximo inicio de la semana, con septiembre en puertas, es diferente al de otros lugares: por algo mañana y pasada son los días de San Ramón y Santa María, ambos festivos locales.