«Nadie quiere renunciar al ritmo de vida que llevaba y eso es lo que genera angustia: el tener que cambiar»
LUGO
Las crisis son cíclicas y de esta «vamos a salir fortalecidos porque va a poner un toque de realidad en nuestras vidas». Para la psicóloga lucense Isabel Flórez, del Centro de Psicología y Psicoterapia Alcor, vivimos una época de cambios tan rápidos que «la tolerancia a la frustración» está bajo mínimos ya que estamos acostumbrados a quererlo todo «ya».
-Hemos vivido una época de hipotecas imposibles, de coches carísimos..., pero ahora se ha acabado y mucha gente se pregunta: «¿Y cómo me como ahora el préstamo que tengo que pagar manteniendo mi nivel de vida?». Porque esa es la cuestión, nadie quiere renunciar al ritmo de vida que llevaba y eso es lo que genera angustia: saber que vamos a tener que cambiar y que es algo a lo que nos tenemos que adaptar. Ante eso se produce una respuesta fóbica, hacia algo que en ocasiones no tiene por que ocurrir.
-¿De qué forma actúan los medicamentos en casos de angustia o depresión?
-Los ansiolíticos y antidepresivos tienen un efecto rápido pero no solucionan el problema. La persona necesita aprender a afrontar esas situaciones que le generan angustia, y para eso lo que funciona es la psicoterapia. Con todo, ambas terapias pueden ser complementarias. La terapia se puede ver siempre como crecimiento personal.
-¿Cuáles son los casos más comunes que atiende esta temporada?
-Sobre todo empresarios y comerciales o personas vinculadas a ellos. Un trabajador que se queda en el paro reduce gastos y no suele ir al psicólogo. Luego, hay de todo tipo, desde el empresario o empresaria al que le va mal y que tiene que echar a gente, a mujeres que se han quedado en paro, pero también niños o adolescentes que viven una situación complicada en casa por la crisis. Eso se refleja en los resultados académicos, algunos no quieren seguir estudiando, otros quieren trabajar...
-Su gabinete también realiza procesos de preselección de recursos humanos para empresas.
-En este momento están parados porque no se está contratando. Y en los pocos que se hacen se filtra muchísimo más. Ahora por ejemplo, a una mujer con determinada edad y casada, que puede tener hijos, no la quieren. Antes costaba encontrar candidatos con una formación determinada, pero ahora no porque mucha gente de Lugo que trabajaba fuera está volviendo con unos currículums muy buenos.