Roban más de 30 ovejas a un vecino de Tirimol en solo dos semanas

X. Francos

LUGO CIUDAD

02 abr 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Se acabó el tiempo de matanzas y ahora los ladrones tienen que buscar otro botín que no sea el de la carne de cerdo. Las ovejas parecen ser el objetivo de algunos cacos a decir de lo que le sucede a un vecino de San Xoán de Tirimol, en el municipio de Lugo, al que le llevaron un total de 32 ejemplares en dos semanas. El último de los robos que efectuaron en la explotación fue en la noche del lunes al martes. El afectado, Amador Rois Flores, acudió a la comisaría para presentar la correspondiente denuncia.

De acuerdo con el testimonio, ofrecido en la jornada de ayer por el afectado, el primero de los robos en su explotación de bovino, se produjo en la noche del 15 al 16 de este mes. Los ladrones reventaron el candado de la cancilla de la entrada y, posteriormente, forzaron la puerta trasera del establo. Se llevaron un total de 10 ejemplares, según indicó Amador.

El afectado considera que ese día los delincuentes pudieron haber utilizado un vehículo robado para poder sacar los corderos del lugar donde se encontraban resguardados. Así lo estima porque ese mismo día, por la mañana, se encontró con agentes de la Policía Local en la zona de Bagueixos, próxima al lugar en el que tiene el establo, les contó lo que le había sucedido y también les pidió asesoramiento para saber cómo actuar. Los policías estaban en el lugar porque encontraron abandonado un vehículo que, previamente, había sido robado. No llegaron a descartar que los animales fueran introducidos en el coche en cuestión para salir del lugar.

El segundo robo, cometido a principios de esta semana, fue realizado prácticamente de la misma manera, sin embargo en esta ocasión Amador Rois cree que los ladrones utilizaron una camioneta o un furgón. En esta ocasión cree que invirtieron menos trabajo y ahorraron esfuerzo. Metieron el vehículo por el medio de la finca y se fueron a la puerta de atrás del establo. Colocaron el furgón de forma adecuada y, a continuación, cargaron los corderos. Las roderas quedaron en muchos puntos de la finca. Fue el único rastro que dejaron los ladrones. Esta vez fueron 22 corderos en total, de acuerdo con la denuncia formulada en la comisaría. Para entrar en el recinto forzaron el candado de la cancela de entrada. Posteriormente también violentaron dos cerraduras de la puerta de acceso a las cuadras.