Un carballo asesino

La Voz

LEMOS

Vecinos de O Corgo denuncian grave peligro en una curva de la DP 1611

06 dic 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Lo llaman el «carballo» asesino. No tenía buen cartel porque, según aseguran en el lugar, recibió el impacto de numerosos vehículos cuyos conductores perdieron el control de los mismos en una suave curva y, desde el domingo por la noche, tiene en su haber una muerte, la del joven Víctor Sobrado, de 27 años. Si su Audi no fuese a encontrarse con el roble y un gran pedrusco que hay en su base, posiblemente hubiera salvado la vida. Medio metro antes, incluso menos, hay un talud de tierra sobre el que el impacto no hubiese sido tan violento.

El árbol en cuestión, que se encuentra en el kilómetro 125 de la carretera de circunvalación de la Diputación Provincial, a caballo de los municipios de O Corgo y Castroverde, quedó quemado como consecuencia de las grandes llamas que se declararon después de que el vehículo accidentado se incendiase. Víctor, el conductor, pudo ser sacado sin vida antes de que las llamas lo carbonizasen. También fue rescatado con heridas graves su acompañante. Ayer, en la zona, comentaban que sacar a este último joven no fue una tarea fácil puesto que le quedó aprisionada una pierna en el amasijo de hierros.

El lugar donde ocurrió el fatal accidente está situado entre las parroquias de Goi (Castroverde) y Fonteita (O Corgo). Los vecinos ya comienzan a acostumbrarse a los accidentes en esta curva que, según dicen, se encuentra mal peraltada.

Ayer, poco después de que fueran retirados del lugar los restos calcinados del vehículo, había discrepancias vecinales sobre el número de accidentes contabilizados en el sitio. Algunos decían que iban más de veinte, otros más de cincuenta. El último parece que lo tuvo un conocido industrial de Castroverde que salió ileso, pero destrozó su furgoneta.

La lluvia aumentó el riesgo

Los vecinos de la zona no dudan en calificar de punto negro el lugar donde ocurrió el accidente. El domingo, la lluvia aumentó el riesgo. Posiblemente el estado resbaladizo de la calzada hizo que el conductor no consiguiera dominar el vehículo. Por cierto que la Guardia Civil trata de establecer una velocidad aproximada a la que circulaba el coche que quedó finalmente calcinado.

Este accidente mortal rompe una buena racha en las carreteras lucenses porque hacía ya varias semanas que no se producían percances con consecuencias trágicas. El año puede cerrarse, según diversos expertos en cuestiones de seguridad vial, con una estadística de siniestros mortales por debajo de la del año pasado.

El fin de semana fue especialmente complicado en la red viaria de la provincia de Lugo donde se produjeron multitud de accidentes, la mayoría de ellos provocados por animales salvajes. El servicio del 061 informó de la intervención en media docena de percances con heridos, algunos de ellos de carácter grave.

Ayer por la tarde volvió a registrarse un considerable aumento de la circulación en la A-6, sin embargo hasta las últimas horas de la tarde no se habían producido accidentes especialmente graves. La lluvia volvió a complicar el tránsito por toda la red.