La Audiencia Provincial de Lugo acaba de archivar la denuncia presentada contra Serramar por los destrozos que sufrió el piso en el que esta empresa tenía su sede en Monforte. La denunciante es la propietaria de la oficina, que acusaba a la empresa o a alguno de sus trabajadores de estar detrás de los destrozos que se produjeron en el proceso de abandono de las instalaciones, entre los que citaba el arrancado de cables de la red informática, la rotura de puertas y cerraduras, el bloqueo de los armeros y la aparición de pintadas insultantes en las paredes.
La sentencia no considera probado que hubiese desperfectos tan graves atribuibles al personal de Serramar como para reclamar responsabilidades penales. El tribunal dice que los dueños del piso quizás pudieran pedir una compensación por la vía civil. El fallo, que ratifica otro similar del juzgado número dos de Monforte, destaca además que «existe un cúmulo de contradicciones en el devenir de la investigación». Portavoces de la empresa Serramar auguraron que este fallo dará carpetazo definitivo a este asunto, «salvo recursos extraordinarios muy poco frecuentes en estos casos».