La moda romana alcanza a todo tipo de comercios lucenses

laura lópez LUGO / LA VOZ

LEMOS

Galerías de arte, chinos o puestos ambulantes se suman al estilo Arde Lucus

07 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

El estilo Arde Lucus ha calado hondo en los comercios lucenses desde hace ya varias semanas. Establecimientos de perfiles tan variados como galerías de arte, chinos o incluso puestos ambulantes, han incorporado a sus ventas artículos para el Arde Lucus, tanto ropa como complementos, y han empezado a decorar ya sus instalaciones para la ocasión. Lugo se mimetiza cada vez más con su pasado romano, hasta llegar a la culminación, que será los próximos días 17, 18 y 19.

Las joyerías sacan a relucir su creatividad con piezas trabajadas en metales nobles. Las tiendas de artesanía ofrecen también artículos realizados a mano, en cuero o en otros materiales, para castrexos o para romanos. Por lo que respecta a la ropa, la hay para toda clase de bolsillos y de gustos. Las boutiques más exclusivas ofrecen atuendos para aquellos a quienes no les duela dejarse una fortuna en la vestimenta, cuyos precios pueden ascender a cientos y cientos de euros. Argumentos tampoco faltan. El Arde Lucus no es una fiesta de disfraces, es una vuelta al pasado romano, y cada vez la gente huye más de la caricatura y la exageración más propia del carnaval, y busca el realismo, con estilo y clase. Además, sobre todo para los lucenses, se trata de un atuendo que se puede conservar de año en año, e incluso cambiando los complementos puede dar como resultado varios modelos diferentes.

Para todos los bolsillos

A pesar de estos argumentos, hay quien prefiere gastarse menos dinero. Y entre esos establecimientos con precios mucho más asequibles están los chinos, aunque en la actualidad, la mayoría de los comercios, sea cual sea su tipo, optan por adaptarse a todos los bolsillos, con precios variados, a veces incluso inferiores al de las tiendas asiáticas. Una de estas tiendas es el Hiper China de la Avenida da Coruña, que también se suma al carro del Arde Lucus. Wu Jianwei trabaja en este establecimiento, donde llevan tres años vendiendo trajes romanos. «Cada año se venden más y hay más modelos», explica. Aun así, la gente suele esperar para última hora: «En junio es cuando más trajes vendemos», continúa esta mujer.

Pero la moda romana se puede encontrar en cualquier rincón de la ciudad. Y ningún lugar mejor para descubrir y opinar sobre moda y estilo que una galería de arte. Es el caso de la Nova Rúa Arte, en la Rúa Nova, donde desde hace unas semanas tienen un espacio reservado para la moda de hace 2.000 años. De esta sección, que pusieron a funcionar hace un lustro (aunque al principio solo vendían complementos), se encargan las hermanas Gemma y María del Carmen Polo.

En esta galería disponen de todo tipo de atuendos, ideales para castrexos o para romanos. «Los más originales de este año quizás sean los de amazona o guerrera, con una sobrefalda en piel natural», explican. Pero, en total, disponen de más de un centenar de modelos diferentes, para todos los bolsillos y de todas las talles.

Además, todo ello aliñado con bisutería de calidad, y todo tipo de complementos, como reproducciones de cascos en metal, armas variadas, broches, abanicos, artículos de la vida cotidiana, pieles naturales...

La confección de la ropa y de los complementos se la encargan a un taller de costura. Y, aunque explican que los precios oscilan entre los 19 y los 100 euros, para poder adaptarse a todos los presupuestos, consideran que el precio no está reñido con el sentido de la estética, un aspecto que cuidan especialmente. «Huimos del disfraz, para nosotros es un vestido, por eso usamos piezas nobles. Nos gusta la idea de la estética, y asesoramos a los clientes, en función de sus gustos, de la moda y de su presupuesto, por eso la gente repite, y cada año vendemos más», dice Gemma Polo.

Explican en esta galería de arte que las modas cambian en cada edición del Arde Lucus, y además de los clásicos y recurrentes, cada año incorporan modelos nuevos. Cada diez días piden nuevas remesas al taller de costura, pero a medida que se acerca el Arde Lucus, algunos modelos y tallas empiezan ya a agotarse.

«Huimos del disfraz, para nosotros es un vestido, por eso usamos piezas nobles»

Gemma Polo