La Diputación confía plenamente en que la puesta en marcha del tren turístico que circulará entre las estaciones de Monforte y Ourense a partir de junio próximo compense el impacto sobre el sector turístico derivado del parón en el catamarán de los Cañones del Sil. Según Xesús Mazaira, la ruta ferroviaria incluirá paquetes alternativos para que los viajeros se desplacen en pequeños autobuses a Sober y puedan comer en restaurantes de este municipio y visitar bodegas y talleres de cerámica de Gundivós.
«Imos traer toda esa xente a Sober para que poida consumir e facer gasto neste concello», afirma Mazaira, que hace hincapié en que el tren turístico desplazará a la Ribeira Sacra «visitantes cun maior poder adquisitivo» que los que transporta habitualmente el catamarán. De momento, la Diputación maneja una lista de contactos de agencias de viajes y turoperadores de varios países, sobre todo de Estados Unidos y Francia, que se han interesado por la iniciativa. «En canto estean atados todos os flecos de funcionamiento do tren poñerémonos en contacto con eles para facer as reservas», detalla.
El portavoz de la Diputación subraya que la inactividad de las rutas en catamarán de Doade perjudicará especialmente al organismo provincial. De acuerdo con sus estimaciones, a la pérdida de ingresos por la venta de billetes se sumará el pago de unos 600.000 euros en gastos por el sueldo de las tripulaciones y el mantenimiento de las embarcaciones.