Entrar a las ocho, restringir las vacaciones y revisar las bajas injustificadas, recetas para enderezar el servicio
LEMOS
El anónimo difundido entre el personal sanitario que radiografía y trata de explicar las carencias del hospital Comarcal de Monforte (cuyo contenido difundió ayer en parte este diario) incluye también una lista con propuestas para acabar con el deterioro del servicio que presta el centro. En esta segunda parte del escrito, su autor o autores, vuelven a incluir datos que hacen pensar que tienen conocimiento directo del funcionamiento del hospital monfortino. El que sigue es un resumen de estas propuestas:
. «Entrar a traballar ás oito en lugar de ás nove e evitar esa idea de que non se pode empezar unha operación máis alá da unha do mediodía polo risco de rematar despois das tres da tarde». El anónimo añade que si las enfermeras hacen relevos en las operaciones no concluidas «tamén o poden facer os médicos que están de garda». Con esta medida, añade, se ganarían cientos de horas de quirófano al año, y sin necesidad de gastar más dinero.
El escrito sostiene que la atención quirúrgica de las urgencias de traumatología que surgen fuera del horario laboral ordinario se retrasan sistemáticamente hasta la mañana del día siguiente. Lo que propone es atenderlas en el momento en que se producen, de forma que los anestesistas estarían más libres durante las mañanas para atender las consultas de preoperatorios.
El anónimo sostiene que en el hospital hay «algunha baixa de dous anos de duración dunha anestesista sen que ninguén se cuestione se, como parece, se trata dun abuso indecente», y propone que la inspección revise ese caso.
La propuesta del anónimo autor de este informe propone autorizar las vacaciones de los médicos especialistas «só cando estean os servizos sanitarios da comunidade cubertos».
Los contratos de los especialistas médicos, apunta el escrito, deberían ser de calidad y de larga duración, en vez de lo que denomina «contratos lixo» actuales. Limitar los «fichajes» de otros hospitales. El documento rechaza que la consellería recurra a especialistas de otros hospitales para llenar los huecos que deja la exigüa plantilla local, como ocurre en el caso de las anestesias epidurales en los partos. En cambio, propone «deixar de tirar o diñeiro a miles para pagar gardas e especialistas doutros hospitais e usar o diñeiro en conseguir especialistas, mesmo en países do leste europeo ou Sudamérica, conseguindo aumento de equipos en lugar de parches de fin de semana».
El autor del escrito cree que «sempre se deron con demasiada facilidade, permitindo que os que gañan unha praza en propiedade en Monforte traballen logo noutro sitio, diminuíndo así os recursos médicos do hospital». El Sergas, añade, debe gestionar con criterios de conjunto la distribución geográfica de los especialistas, y no pensando «en resolver primeiro os problemas dos grandes centros e deixando as sobras para cubrir os comarcais».
El escrito plantea «facer un pool con especialistas cirúrxicos que o desexen para que traballen como segunda chamada (en lugar de ter un segundo cirurxián, un segundo xinecólogo e un traumatólogo cobrando presenza física)». Así habría una sola persona para las tres especialidades y a los traumatólogos se les podría pagar unicamente una guardia localizada.
El informe anónimo insta al director gerente y al director médico del hospital que «cumpran as funcións para as que se lles paga e fagan cumprir as súas obrigas ao persoal médico en xeral, pero sobre todo aos dos servizos centrais, como anestesia e cirurxía», aunque también propone irónicamente destituir directamente a los directores «pola súa clara incompetencia».
También reclama que Sanidade pague a los médicos «soldos decentes», por ejemplo como los que paga la sanidad pública portuguesa, y así evitar que los profesionales se vean tentados «a facer todo tipo de compangos para levar á casa un soldo digno e acorde á súa formación e responsabilidade.