El Ribeira Sacra afronta una semana decisiva de cara a conocer si saldrá o no en competición la próxima temporada. El próximo jueves finaliza el plazo para realizar la inscripción del equipo en el campeonato de liga. No obstante, a estas horas nada es seguro ni definitivo.
El presidente de la entidad, José Ramón Martínez Mareque, será recibido mañana en la Diputación de Lugo. En esa reunión, el mandatario del equipo quiere que los dirigentes de este organismo concreten la cuantía económica de la ayuda que le entregarán al Ribeira Sacra. «En su momento, tanto Antón Bao como Eduardo Fernández Abel nos comentaron que la ayuda se ajustaría a la nueva situación del equipo. Yo insistiré en que se tenga muy en cuenta que el Ribeira Sacra es el principal equipo femenino de la provincia, por lo que deberemos ser tratados como tal», apuntó José Ramón Martínez Mareque.
Otra de las administraciones de la que la directiva no sabe nada es de la Secretaría Xeral para o Deporte. «Hace tiempo que solicitamos una entrevista por los conductos reglamentarios al señor Lete, pero a falta de dos días para la finalización del plazo para inscribirnos, no tenemos noticias. El mensaje que quiero enviar es que si no tenemos garantías mínimas del respaldo institucional, el equipo no saldría a competir ni en la Superliga ni en otra categoría», dijo Mareque.
Ayuntamiento
Por lo que respecta al Ayuntamiento de Monforte, el presidente del Ribeira Sacra no espera novedades, ya que las noticias de las que disponen es que las arcas municipales no ofrecen posibilidades de un incremento en la ayuda.
La junta directiva está trabajando también en conseguir el respaldo financiero de empresas privadas. No obstante, el frágil tejido industrial de la zona sur y de la provincia no invita al optimismo. De hecho, Mareque confirmó que algunas empresas de las que prestarían apoyo son de fuera de Galicia.
Por otra parte, la situación económica que atraviesa la entidad es difícil. «Arrastramos un retraso importante en el pago de las ayudas de las instituciones. Estamos pendientes de unos 150.000 euros de la pasada temporada, que hasta el momento recaen en los directivos. Esa es la situación que tenemos. Así es difícil poder maniobrar», apuntó Mareque.
Las próximas horas serán decisivas. En función de cómo se desarrollen los acontecimientos, es decir las entrevistas con los responsables de las administraciones, y de su grado de implicación, el club decidirá si sale o no a competir. El jueves es la fecha límite.