El jurado ha decidido. Ya sabemos cuáles son, a juicio de los expertos convocados este año, los mejores vinos Ribeira Sacra de esta campaña. La denominación de origen celebró ayer en el parador de turismo de Monforte la edición número quince de su Cata dos Viños. Como es norma, el resultado se conoció durante la comida a la que el consejo regulador invitó a decenas de representantes del mundo del vino y las administraciones públicas. Pero vamos ya con la lista de ganadores. Empezamos con los vinos tintos, en los que este año mandan las bodegas de Vilachá de Salvadur. La medalla de oro en tintos fue para el vino Val do Frade , de la SAT Os Ermitaños, de Vilachá (A????????Pobra do Brollón). La medalla de plata se la llevó San Mamed , de la bodega de Rosa María Pumar, también de Vilachá. La de bronce fue para la marca Javier Fernández , de Bodegas Saíñas, de Espasantes (Pantón). En cuanto a los blancos, el oro se lo quedó Algueira , de Amandi, la plata fue para Abadía da Cova , de O Saviñao, y el bronce para Ponte da Boga , de Castro Caldelas. En la categoría reservada para los vinos en barrica o sin barrica pero correspondientes a otras añadas, la medalla de oro, la única en juego, se la llevó el Magnum Vía Romana Mencía del 2006. Este último resultado fue recibido con cierta sorpresa porque esta marca de la bodega de Chantada no es de vino envejecido en barrica, que son los que a priori se espera que dominen en esta categoría. Caras nuevas. La convocatoria anual del consejo regulador es una buena ocasión para pulsar el ambiente social y político. Las caras entre los invitados políticos cambiaron con respecto a la comida del año pasado. Los máximos representantes de la Xunta fueron esta vez Raquel Arias , la ex alcaldesa de Sober y actual delegada territorial del Gobierno gallego en Lugo, y Susana López , que además de chantadina es secretaria xeral de Familia e Benestar. El presidente del consejo regulador, José Manuel Rodríguez , tuvo ocasión de saludar por primera vez en los quince años de vida de esta cata anual a un presidente de la Diputación de Lugo. José Ramón Gómez Besteiro rompió la racha de ausencias en la que su atencesor Francisco Cacharro perseveró tanto que llegó un momento que resultaba más fácil ver en Monforte a su homólogo ourensano, José Manuel Baltar , que a él mismo.