Finsa potencia la biomasa en su planta de Rábade y Begonte para usar residuos de madera

X.M.P.

LEMOS

28 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Las instalaciones de Finsa en la comarca, con una amplia nave que ocupa terrenos de los municipios de Rábade y de Begonte, han sido incluidas por la compañía en un plan de empleo de la biomasa que persigue la reducción del uso de combustibles en la obtención de energía. La biomasa que servirá de soporte para esta operación procede de cortezas o de otros sobrantes producidos en la actividad transformadora de la fábrica, según fuentes de la empresa

La planta de la comarca chairega tiene un caldera de biomasa que acaba de ponerse en funcionamiento y que permitirá conseguir una potencia de hasta 32 megavatios que de otro modo se conseguirían con gas o con combustibles fósiles, según explicaron fuentes de la compañía. El montaje ha supuesto una inversión de 11 millones de euros

Se trata de la segunda planta en la que Finsa pone en marcha un sistema de este tipo, orientado a la consecución de un ahorro que la compañía califica como «importante». La primera planta en la que se ha implantado este proceso es la de Padrón; por ahora, de acuerdo con las manifestaciones de la empresa, no se ha decidido si el sistema se ampliará a otras fábricas del grupo. La utilización de la biomas comenzó en la fábrica padronesa en el 2006, y supuso el inicio de un proceso que permitía la generación de 35 megavatios que se se usarán para obtener energía. Ese primer paso, en cuya inauguración ya se anunció que Rábade sería el siguiente objetivo, requirió para el grupo una inversión que ascendió a los 15 millones de euros.

Menos emisiones

El empleo de la biomasa tiene repercusiones en las emisiones de sustancias contaminantes, según Finsa subrayó ayer. Por otro lado, la industria forestal gallega, de acuerdo con las informaciones de la empresa, genera productos que al año permiten fijar un total de 1.750.000 toneladas de carbono, de los que el 62% corresponde a la industria del tablero.

Para el director de la planta de la comarca, el proceso de utilización de la biomasa refleja esa «decidida» voluntad de utilizar energías renovables en las instalaciones del grupo.

La empresa tiene plantas de producción en en las cuatro provincias, repartidas por Santiago, Padrón, Ourense, Caldas, Vilagarcía y Mondoñedo. En este último municipio compró, en el 2005, Aglomerados Ecar: la operación permitió pasar de la fabricación de aglomerado a la obtención de componentes para muebles en una factoría de unos 80 trabajadores. Mientras tanto, la cifra de puestos de trabajo de la fábrica asentada en Rábade y en Begonte llega en estos momentos a los 350.