El joven fallecido en la N-120 será enterrado mañana en Torbeo

C.???C.

LEMOS

17 abr 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El joven conductor fallecido ayer en un accidente de tráfico en la carretera N-120 en Monforte será enterrado posiblemente mañana en el cementerio parroquial de Torbeo. Óscar Torres Díaz tenía 19 años y era muy conocido en Ribas do Sil, donde su muerte fue recibida con gran consternación. Decenas de personas acudieron a última hora de la tarde a la casa en la que vivía el chico con su familia en San Clodio. Se trata de la tercera persona fallecida en accidente de tráfico en las carreteras de la comarca de Monforte en lo que va de año.

La víctima del siniestro de ayer estudiaba en la escuela de hostelería de Rosende, en Sober. Su madre es natural de Vilares, en la parroquia de Torbeo, y el padre de O Incio. Tenía dos hermanos de 20 y 22 años que también estudian, pero en Lugo.

El accidente que le costó la vida a Óscar Torres se produjo a las seis menos cinco de la tarde en el kilómetro 513 de la N-120, en el tramo que pasa al lado de una gravera abandonada, una zona con línea discontinua en la que la carretera traza una suave curva con amplia visibilidad.

El coche en el que viajaba el fallecido, un Seat Ibiza matrícula 9650???DRG circulaba en dirección a Ribas do Sil cuando se empotró de frente contra un camión de la empresa de reparto Azkar que venía en dirección contraria. El impacto se produjo en el carril del camión.

El cuerpo fue rescatado después de que los bomberos de Monforte cortasen con un equipo de excarcelación la carrocería del turismo, cuya parte delantera quedó empotrada bajo la cabina del camión.

El conductor del vehículo pesado, un hombre de 44 años vecino del municipio ourensano de Lobios, tuvo que recibir asistencia sanitaria, pero sólo presentaba heridas leves

La carretera permaneció cortada durante alrededor de una hora, mientras duró el rescate del cuerpo y la retirada de los vehículos, lo que provocó grandes colas en ambos sentidos.