Las industrias lácteas, una vez más a través de sus recogedores, están comunicando a los ganaderos que en las facturas del mes de marzo, que abonarán después del 15 de abril, les efectuarán nuevos descuentos en el precio de la leche. Se trata de la segunda reducción de en lo que va de año, que realizan de forma unilateral y a mes vencidos. Esta medida agrava aun más la complicada situación que atraviesan las explotaciones lácteas gallegas.
Los ganaderos no se han visto sorprendidos por la decisión de las empresas, ya que su modo de actuar sigue las mismas líneas a las que los tienen acostumbrados. Algunos que intentaron cambiar de empresa sufrieron nuevamente trabas para poder hacerlo y desistieron de su intención.
Según USAG, la suma de ambos descuentos, el de febrero y el de marzo, suponen 0,09 euros en litros, es decir 15 pesetas y representan una reducción de ingresos de entre 900 y 1.000 euros al mes de media. USAG criticó al resto de los sindicatos agrarios por su incapacidad para impedir una nueva bajada de los precios. Los reproches también los extiende a la propia Consellería de Medio Rural.
Ganaderos consultados señalaron que, una vez constatada la reducción del mes de marzo, el precio de la leche se sitúa en los mismos parámetros que antes de la subida de agosto, que supuso 0,18 euros (unas 30 pesetas), que supuso un respiro para el sector. El incremento se vio eclipsado por el sufrido de forma paralela por los cereales y por el gasóleo.
Inquietud
Las industrias lácteas bajaron los precios, pero no lo hicieron todas en la misma medida. Algunas redujeron 0,04 euros el mes pasado y para éste anunciaron que serían 0,02. Otras ya redujeron directamente en febrero 0,06 euros en litro.
Los ganaderos están inquietos ante la incertidumbre que se cierne sobre su futuro al ver reducidos los ingresos mensuales. En el mes de agosto la subida experimentada por la leche, que rondó los 0,18 euros en litro hizo que los titulares de algunas granjas se decidieran a realizar determinadas inversiones en la mejora de sus explotaciones, que ahora causan preocupación a la hora de asumir los pagos de los créditos.
La subida de los precios de la leche animó también a los titulares de las granjas a comprar más reses para obtener unos ingresos superiores por la venta de leche. El aumento de la demanda hizo que los precios de las novillas se dispararán y que empezaran a escasear. Este mercado se supone que retornará a la normalidad con el descenso de la leche.
Las inversiones realizadas en el campo se hicieron al amparo de la subida de los precios de la leche en el mes de agosto, que hizo albergar esperanzas de continuidad en esta situación por la escasez de leche en los mercados mundiales. En menos de seis meses las expectativas dieron la vuelta y en algunas explotaciones están tratando de aguantar para tratar de evitar los embargos.
Los sindicatos agrarios están realizando estudios sobre las explotaciones que tendrán que cerrar al ser incapaces de asumir la nueva situación por falta de rentabilidad.
La bajada de los precios de la leche en origen no fue acompañada de descensos en la misma proporción en los supermercados. Las marcas más caras, sin embargo, ya no están cobrando a más de un euro el litro.
Leche con sabor distinto
Algunos consumidores se quejan de que la calidad de algunas marcas de leche que están en el mercado no es la misma que hace unos meses, especialmente la entera. Quienes más lo notan en este caso son los paladares infantiles.