Roberto Varela, ratificó ayer su compromiso de no emprender, cuando menos este año, el próximo ni el siguiente, una sola obra nueva en el complejo compostelano.
20 oct 2011 . Actualizado a las 13:32 h.El conselleiro de Cultura e Turismo, Roberto Varela, ratificó ayer su compromiso de no emprender, cuando menos este año, el próximo ni el siguiente, una sola obra nueva en el compostelano complejo del monte Gaiás, una decisión que enmarcó en la actual política de su departamento: «Nin un só euro máis para cemento». Sus declaraciones coinciden en el tiempo con la entrada en el Parlamento autónomo, esta misma mañana, del proyecto de Orzamentos de la Xunta para el 2012, los cuales incluyen otro recorte -el tercero consecutivo- en el capítulo de fondos asignados a la pública Fundación Cidade da Cultura.
El más bajo
El organismo gestor del recinto manejará durante el ejercicio venidero el presupuesto más bajo de su historia, excluyendo los fundacionales del 2000 y del 2001. En concreto, controlará 23.526.132 euros, el 57,6 % transferido directamente por la consellería y el 42,4 obtenido con cargo a su fondo de maniobra, a recursos generados en anteriores años y a ingresos financieros y de explotación, así como por otras vías secundarias. Gestionará, por tanto, casi tres veces menos dinero que en la etapa final del bipartito (2009) y la mitad que en el 2007, grosso modo. Como muestra la tabla evolutiva que acompaña esta información, respecto al 2010 se producirá una caída de 44,1 puntos porcentuales. Y, ya en comparación con el 2011, el descenso rondará el 31,7 %, cuando el conjunto de la inversión del Gobierno de Núñez Feijoo bajará apenas una décima.
Amortizar activos
La fundación destinará el capital a amortizar activos, a gastos de funcionamiento y de personal, a desarrollar contenidos, a la adquisición de equipamiento, a remates interiores en el museo y los servicios centrales del complejo, y a urbanizar el entorno de ambos inmuebles, cuya apertura provisional se producirá en breve. Otros tantos edificios (biblioteca y archivo) llevan diez meses funcionando. Y los dos restantes, presupuestados en 175 millones, se hallan en fase embrionaria y paralizados.