Trágica noche de San Juan en A Coruña con dos muertos en Labañou y en el Orzán

Redacción digital

GALICIA

Un joven brasileño de 22 años falleció tras caerse a una gran hoguera en el barrio de Labañou. Esta mañana un argelino de 42 años ha muerto ahogado en la playa del Orzán.

24 jun 2011 . Actualizado a las 19:25 h.

La noche de San Juan ha terminado de forma trágica en A Coruña. Horas después de conocer que un joven brasileño de 22 años falleció a medianoche al caer en una hoguera del barrio coruñés de Labañou, Emerxencias 112-Galicia informaba de la muerte de un hombre argelino de 42 años en la playa del Orzán. La alerta de este último incidente saltó a las 08.30 horas tras darse el aviso de que un hombre había desaparecido cuando nadaba en el arenal. Otra persona que estaba en su compañía pidió auxilio y consiguió salir del agua. La Policía Local sacó finalmente del mar al hombre que estaba desaparecido y que se encontraba en estado inconsciente. Efectivos del 061 han intentado reanimarlo pero no ha sido posible y finalmente ha muerto. Pasadas las 09.30 horas de la mañana el cuerpo aún permanecía en el arenal a la espera del juez y del forense para el levantamiento del cadáver.

Uno de los testigos del suceso ha sido el fotógrafo Óscar París, que se encontraba en la playa a primera hora para hacer la cobertura de la limpieza de los arenales. Todavía consternado por el terrible suceso, ha contado para el programa Voces de A Coruña, de RadioVoz, que presenta Pablo Portabales, que vieron como la efectivos de la Policía Local advertían a un joven de que no entrase en el agua, tras unos momentos de confusión, tres agentes se han sacado la ropa para introducirse en el agua. «Lo sacaron del agua y comenzaron a practicarle los primeros servicios de auxilio, mientras llegaba el 061», el fotógrafo dio el relevo a los agentes en las maniobras de reanimación pero no fue posible.

Tanto el fallecido como su acompañante, que no está herido, se encontraban alojados en el albergue de Padre Rubinos.

Tragedia al saltar la hoguera

Horas antes de que el hombre falleciese ahogado en el Orzán, un joven de 22 años y de origen brasileño -César Pires- moría a medianoche al caer en una hoguera que los vecinos del barrio de Labañou habían encendido en un descampado próximo a la calle del Pino. «Hicimos varias fogatas, dos o tres para los niños, para que pudieran saltarlas y acercarse, y la grande», explicaba uno de los consternados organizadores. Fue precisamente en la de mayores dimensiones donde se produjo la tragedia. Alrededor de las doce de la noche se encendió esta fogata y poco después César Pires intentó saltarla. «Tropezó con un sofá que había allí y quedó encastrado», explicaba uno de los vecinos del barrio que intentaron salvarlo. Fueron tres jóvenes que se encontraban en las inmediaciones los que se lanzaron de inmediato a socorrerlo, pero no pudieron hacer nada.

«Cuando me estaba acercando cambió el viento y me vino una llamarada que hasta me quemó aquí», indicaba uno de ellos mostrando su brazo. A su espalda, prácticamente todos los vecinos de la zona, que se habían acercado al lugar, acordonado por varias dotaciones de la Policía Nacional y la Local.

Los servicios de emergencia llegaron de inmediato y también dos dotaciones de bomberos. Una de ellas fue la encargada de apagar la fogata para poder recuperar el cuerpo del fallecido.

Uno de los amigos que intentaron sacarlo tuvo que ser trasladado a un hospital de la ciudad al sufrir diversas quemaduras en las manos.

«En 60 años que voy a cumplir nunca ha pasado nada y tuvo que ser hoy», apuntaba una de las vecinas de Labañou, indicando que el joven había sido adoptado, «pero sus padres fallecieron el año pasado».

Dura descripción

Entre lágrimas, uno de sus amigos lamentaba la mala suerte, mientras otro explicaba que lo había visto cuando se caía y quedaba «encastrado en el sofá». En una cruda descripción de lo ocurrido «lo siento, pero es lo que pasó y lo que yo he visto», relataba cómo el joven se había quemado «en unos minutos, en muy poco tiempo».

Desde el servicio de bomberos de A Coruña explicaron que las llamas carbonizaron el cuerpo del chico, que vivía con un hermano. Entre las personas que estaban junto a la fogata cuando se produjo el accidente había un joven muy afectado que comentó que era primo del fallecido.

El suceso dejó al vecindario consternado, después de que los primeros momentos fueran de confusión para tratar de saber quién era. «Ese chico alto que andaba con...», explicaba a alguien una vecina.

Los concejales de barrio Mariel Padín y Juan de Dios Ruano se desplazaron al lugar, así como el jefe de Seguridad Ciudadana, Germán Lago.

Pasada la una de la madrugada llegó el juez de guardia para proceder al levantamiento del cadáver.