El novillo, que se recupera del estrés de la fuga, ha sido donado a una oenegé catalana
31 dic 2010 . Actualizado a las 02:59 h.El novillo Tame, de tres años de edad, entró el pasado lunes en la cadena de producción del matadero porriñés de Frigolouro. Entonces, valía 1.200 euros en el mercado. Su espectacular fuga por el pueblo durante 26 horas lo catapultó al estrellato y su propietaria, la cárnica Coren, lo ha indultado, «como a los toros en la plaza».
El director general adjunto de Coren, Emilio Rial, firmó ayer la donación de la res a la oenegé Fundación Altarriba Amigos de los Animales, con sede en Barcelona, que cuidará al ternero de 450 kilos. Tame se recuperaba ayer en un establo del matadero del estrés que sufrió por la fuga y su posterior captura con dardos tranquilizantes. La oenegé ha propuesto rebautizarlo Santiago, en honor a Galicia. El portavoz vigués, Julio Ortega, agradeció la sensibilidad de las autoridades porque no abatieron a balazos al animal. En breve, será trasladado en camión, «quizás, mañana [por hoy]», a un santuario en Barcelona. Allí gozará de semilibertad y recibirá cuidados veterinarios. «Esperamos que viva más de cinco años», indicó Ortega. Este cree que Tame o Santiago se olió lo que «le iba a esperar y, como muchos, quiso escapar. Eso demuestra que los animales tienen interés por vivir». El director del matadero calificó la fuga de «insólita». Un directivo de Coren recalcó la sensibilidad de su firma, que, a través del programa Pollo Feliz, cría pollos camperos en libertad.