La Xunta gastará dos millones en organizar el viaje del Papa y otros tantos para televisarlo

M. Cheda SANTIAGO/LA VOZ.

GALICIA

Un ex cargo de la Conferencia Episcopal dirige la oficina pública de apoyo al Pontífice

07 jul 2010 . Actualizado a las 02:32 h.

La visita de ocho horas que el Papa prevé realizar a Santiago el próximo 6 de noviembre generará a la Xunta, de acuerdo con sus propias estimaciones provisionales, gastos por un importe global de cuatro millones de euros, dos de los cuales serán destinados en exclusiva a sufragar la retransmisión del acontecimiento «a todo o mundo» a través de la televisión pública autonómica. En alusión a la pertinencia de efectuar dicho desembolso en plena crisis económica, el conselleiro de Presidencia proclamó ayer: «Ninguén cuestiona que o retorno de beneficios para Galicia sen dúbida vai ser moito máis elevado». Previamente, Alfonso Rueda había cifrado en «non menos» de 200.000 las personas que se desplazarán a Compostela con el ánimo de ver al Pontífice «nalgún momento».

El conselleiro compareció ante la prensa tras la primera sesión de una comisión interdepartamental creada en el seno de la Administración gallega con el objeto de coordinar los esfuerzos. Sus miembros aprobaron el lanzamiento formal de una oficina especial que, adscrita a Presidencia, «contará cun equipo permanente con acreditada experiencia neste tipo de accións e se encargará do traballo diario de preparación», informó el Ejecutivo de Feijoo mediante una nota oficial. Gozará de competencias para contratar a empresas privadas «pequenas» asistencias técnicas.

Con sede en el pazo de Raxoi, al frente de ese flamante organismo se sitúa ya el compostelano de 42 años de edad Víctor Cortizo, socio de un despacho de abogados en Madrid, secretario de Pastoral Juvenil en la Conferencia Episcopal Española desde 1997 hasta el 2008 y presidente de Bridge to China, consultora que procura a sus clientes negocios en el gigante asiático. Casado y padre de tres hijos, conoce el terreno, mayormente, gracias a su activa participación en el montaje de la cuarta Jornada Mundial de la Juventud, la cual había transcurrido en Santiago, bajo liderazgo del anterior pontífice, Juan Pablo II, en agosto de 1989.

Atención a mil periodistas

Si bien no intervino, ayer ya escoltó a Rueda mientras este último explicaba a los medios que el erario de la comunidad financiará, siempre desde la «austeridade», un centro de prensa internacional capaz de alojar a los más de mil profesionales del gremio que -augura el Gobierno gallego- cubrirán la estancia en la comunidad de Benedicto XVI, así como sendos planes de emergencias, voluntariado, seguridad y movilidad. Y también una programación cultural que, articulada en torno al 6 de noviembre, va a dejar de ese día «unha pegada indeleble» en la historia.

A ello contribuirá el despliegue de una TVG que proyecta movilizar a 600 trabajadores, 70 cámaras y siete unidades móviles, entre otros medios.