Investigan la relación del consumo de éxtasis líquido en Arousa con abusos sexuales

Susana Luaña Louzao
Susana Luaña VILAGARCÍA/LA VOZ.

GALICIA

Una docena de víctimas denunciaron que les habían suministrado la «droga del sexo» sin su conocimiento.

30 jun 2010 . Actualizado a las 02:32 h.

La llegada de cuatro mujeres en estado de coma al Hospital do Salnés por haber ingerido éxtasis líquido es, oficialmente, un episodio aislado, y al menos no se tiene constancia ni en Vilagarcía ni en otras localidades del entorno de que haya una partida de esta droga que se esté utilizando no solo como estupefaciente, sin también como una sustancia que facilita la pérdida de voluntad de la víctima para cometer sobre ella abusos sexuales.

Sin embargo, fuentes relacionadas con el caso ofrecen en O Salnés otra versión que dista mucho de la oficial y que explicaría que tan solo en unas semanas hayan llegado a urgencias cuatro casos de jóvenes intoxicadas, y que algunas hayan llegado a reconocer que la droga la habían ingerido sin ser conscientes; es decir, que una segunda persona se la había echado en la bebida para luego aprovecharse de ellas sexualmente.

Al parecer, todavía no se sabe con certeza si se trata de éxtasis líquido, burundanga, cristal o algún otro derivado químico de fabricación en laboratorio y efectos similares, porque en todos los casos los síntomas son los mismos: una euforia inicial a la que sigue posteriormente una postración que acaba, en algunas ocasiones, en un estado similar al coma, y que es aprovechado por los supuestos agresores para cometer abusos sexuales. «Es una droga nueva -asegura un profesional que intervino en algunas de las investigaciones-, y en los hospitales están tomando muestras para analizarla».

Todo indica que los casos que se dieron en el Hospital do Salnés no son los únicos, y tampoco es un fenómeno tan reciente. «Los hubo en Vilagarcía, en Cambados y en Pontevedra; se sabe de diez o doce, aunque solo cuatro o cinco lo denunciaron». En todos ellos se repite la historia: una joven que sale de copas y que acaba siendo víctima de abusos sexuales. No se acuerda de nada porque en un determinado momento de la noche se queda sin sentido. Cuando se le hace un análisis se descubre que ha consumido éxtasis líquido, o alguna otra droga de características similares. Todas aseguran que no lo hicieron de forma voluntaria.

Hay una investigación abierta, ya que no se descarta que en la provincia de Pontevedra exista algún laboratorio clandestino en el que se fabrica la droga, aunque también es muy fácil obtenerla a través de Internet.

En las aprehensiones de drogas realizadas el año pasado por las fuerzas del orden, Galicia está a la cabeza en los alijos de éxtasis. Pero no se debe a que su consumo esté más extendido en esta comunidad, sino a una operación realizada en abril en A Coruña en la que se intervinieron 150.000 pastillas, un decomiso histórico.