El ministro invita a superar «localismos estériles» y «políticas de tierra quemada» para ser competitivos
24 ene 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Seis meses después de rubricar en el mismo escenario el pacto político que blinda los 4.678 millones de euros necesarios para que el AVE llegue a Galicia «en torno a finales del 2015», según la referencia literal del compromiso que asumió entonces el ministro de Fomento con Feijoo, José Blanco regresó ayer al Hostal dos Reis Católicos para presidir la firma del convenio para la puesta en marcha del comité de rutas aéreas de Galicia, una iniciativa con la que las tres ciudades con aeropuerto remontan las pugnas localistas por los mismos destinos y usuarios para sumar esfuerzos en una estrategia conjunta que les permita mejorar la oferta, ganar viajeros y hacer frente a la voraz competencia de Oporto.
En el 2009, los aeródromos gallegos perdieron usuarios por vez primera desde el 2002, cuando los atentados del 11-S provocaron una fuerte crisis en el sector. Después de encadenar cinco ejercicios de crecimiento, en el último año recibieron las tres terminales de la comunidad 351.000 pasajeros menos que en el 2008. El tropiezo gallego contrastó con el repunte del Sá Carneiro, que el año pasado ganó 547.000 usuarios. La terminal de Oporto no ha dejado de crecer desde el 2003, para pasar en ese período de 2,6 a 4,5 millones de viajeros anuales.
El responsable de Fomento, que estuvo acompañado por el conselleiro de Medio Ambiente, los alcaldes de las tres ciudades y los representantes de las cámaras de comercio y de la patronal, puso el acento en la importancia de reaccionar en ese contexto cada vez más competitivo y dar un impulso al transporte aéreo como un medio «decisivo para potenciar el turismo» en pleno año santo. «No podíamos permanecer impasibles en un momento en el que, si no actuamos, otros obtendrán ventajas», subrayó Blanco. Apuntó que el comité será el foro en el que aportar y debatir propuestas para fraguar decisiones coordinadas. El ministro abogó por superar «localismos estériles» y «alimentar el consenso y no la política de tierra quemada».
Galicia opina pero no decidirá
Blanco, que completó su agenda sabatina en Galicia con la visita a las obras de la tercera ronda coruñesa, anunció que dentro del nuevo modelo aeroportuario, el Gobierno central aprobará antes del verano un real decreto para crear comités aeroportuarios en cada autonomía. En el caso de Galicia, esa figura permitirá que la comunidad, que estará representada al 50% con Fomento, pueda realizar propuestas sobre los planes directores de los aeropuertos, estrategias para su desarrollo y sobre la coordinación de políticas urbanísticas que afecten a las terminales. En todo caso, la decisión seguirá correspondiendo al ámbito estatal. Blanco repasó los proyectos en marcha para mejorar los tres aeródromos gallegos.
La representación de la Xunta recayó en el conselleiro Agustín Hernández, que señaló que el comité de desarrollo de rutas sienta las bases para incrementar el tráfico aéreo en Galicia. Recordó que el Gobierno ha inyectado 4,5 millones para implantar líneas de bajo coste y, en línea con Blanco, remarcó la importancia de «defender os intereses xerais sobre os locais».