El AVE a Portugal sufre su segundo retraso oficial en solo tres años

GALICIA

El país vecino plantea segregar las mercancías de los pasajeros para lograr una línea más barata

24 nov 2009 . Actualizado a las 11:48 h.

Como ya se anunciaba a media voz días antes de la reunión entre los responsables de infraestructuras de España y Portugal, el plazo del 2013 forjado hace tres años en la cumbre de Badajoz para el AVE entre Galicia y Portugal ha sido discretamente enterrado en aras de un horizonte mucho menos concreto, pero sí más realista, que sitúa la finalización la línea Oporto-Vigo «no antes del 2015».

El ministro de Fomento, José Blanco, fue el encargado ayer de administrar en solitario el segundo retraso oficial de esta infraestructura -antes de la cumbre de Badajoz el plazo era el 2009- frente a la tibieza mostrada en este asunto por su homólogo luso, António Mendonça, que se mostró dispuesto «a acelerar los proyectos para que todos los objetivos sean cumplidos», según informa Efe.

En cambio, tras la reunión de ambos equipos técnicos, el ministro español fue más explícito respecto a los problemas que arrastra esta infraestructura en territorio español, especialmente en los algo más de nueve kilómetros entre O Porriño y la frontera. La oposición de este municipio y de otros de la zona al proyecto han obligado a Fomento a encargar un nuevo estudio informativo y volver a empezar de cero la tramitación administrativa, por lo que desde hoy en adelante quedan al menos dos años más de gestión del proyecto en los despachos.

En realidad, según ha podido saber La Voz, el ministro español habría asumido el desgaste del retraso en solitario tras obtener el compromiso portugués de que no se va a desistir de la construcción de la línea desde Oporto hasta la frontera, algo que las maltrechas arcas públicas no permitirían en un plazo tan corto, sobre todo si se tiene en cuenta que los ejes prioritarios para el Gobierno luso son Lisboa-Oporto y Lisboa-Madrid. Para esta última conexión, en principio, se mantendría la fecha del 2013.

Ganar tiempo

En este sentido, la relajación del plazo hasta al menos el 2015 da algo de aire a la Administración portuguesa y permite a la española negociar con los municipios afectados un trazado de consenso. Se gana tiempo, por tanto, para impedir que este trazado -«muy importante para España», dijo Blanco- se caiga de las prioridades lusas.

Portugal propone además aligerar la carga económica del AVE Oporto-Braga-Valença segregando el tráfico de mercancías por la vía actual y creando una línea paralela exclusiva para pasajeros. Esto les permitiría mantener ciertas pendientes de trazado que no soportan los convoyes de mercancías y licitar una obra con menos desmontes y, por tanto, asumible en el medio plazo por la hacienda lusa.

Fomento se ha comprometido a estudiar la propuesta y a dar una respuesta al Ejecutivo de Lisboa en el primer trimestre del 2010. También se crearán varios grupos técnicos de trabajo para analizar esta conexión y otras infraestructuras pendientes entre ambos países.