En junio se preveía que la ocupación cayese en agosto un 20%, pero el descenso se situará entre el 2 y el 4%
05 sep 2009 . Actualizado a las 12:06 h.El turismo, uno de los pilares de la economía española, ha comenzado a agrietarse de forma alarmante. El contexto de crisis y los destinos emergentes más económicos han dado este año la puntilla a una actividad estratégica en la contribución al producto interior bruto (PIB) español. En comparación con el conjunto del Estado, Galicia ha salvado con nota una temporada que también se presagiaba negra para la autonomía gallega.
A comienzos del verano, las previsiones apuntaban a un descenso de la ocupación en la comunidad de hasta el 20%. En junio cayó solo un 1,6% -frente al 4,3% de la media española, según el INE- y el dato adelantado de agosto estima una bajada de entre el 2 y el 4%, según la información avanzada ayer en Santiago por Juan Silva, presidente de la Confederación de Empresarios de Hostelería de Galicia (Cehosga), y por Carmen Pardo, secretaria xeral de Turismo.
Este comportamiento diferencial del sector gallego respecto al español se explica por la confluencia de dos factores. Por un lado, el resto de las autonomías dependen más de los viajeros extranjeros, que se han desplazado también menos por el contexto de crisis. Y en segundo lugar, los españoles han salido menos fuera y han optado por el turismo interno, lo que ha beneficiado a Galicia.
Muchos peregrinos
En esta buena tendencia ha tenido mucho peso el atractivo de la capital gallega con el Camino. En el mes de julio pasaron por la Oficina del Peregrino de Santiago un total de 26.194 viajeros, un 25% más que el mismo mes del año anterior. En lo que va de año, según datos difundidos por la Xunta, han hecho este trámite 75.180 peregrinos, un 16% más que en el mismo período del 2008.
Carmen Pardo aseguró ayer en Santiago que el conjunto de datos difieren del «trágico» escenario trazado en junio, y permiten ser moderadamente optimistas, aunque advirtió de que todavía faltan por analizar otras variables importantes sobre el comportamiento del sector turístico. A su juicio, la clave estará ahora en analizar los ingresos obtenidos por los establecimientos turísticos en un contexto de bajada de precios. En concreto, los datos de julio apuntan a un descenso del 2,4% en la recaudación de estos negocios.
A esto se suma que, según la Encuesta de Gasto Turístico, los turistas extranjeros que vinieron a Galicia el pasado mes de julio dejaron un total de 6.650.000 euros, un 6% menos que en el 2008. El gasto medio por persona cayó un 3%. En este contexto, el presidente de Cehosga, Juan Silva, criticó las «ofertas agresivas» lanzadas por algunos establecimientos para compensar su baja ocupación, e incluso las definió como «temerarias».
Peligrosa tendencia
Juan Silva entiende que es peligroso que esta tendencia se consolide en el futuro porque desvaloriza la cadena y hace que se ofrezcan servicios por debajo del coste que supone prestarlos.