Obreros polacos del Gaiás denuncian a una subcontrata por abusos laborales

GALICIA

Afirman que cobraban por 40 horas semanales y trabajaban 70, incluyendo sábados y domingos

04 sep 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Tenían contrato por 40 horas semanales y trabajaban alrededor de 70. También los sábados y los domingos se subían al andamio. Eso es lo que denuncian un grupo de obreros polacos que trabajaban en la colocación de las losas de cuarcita traídas desde Brasil y con una partida presupuestaria reservada de ocho millones y medio de euros, que conformarán la cubierta de los edificios del complejo del monte Gaiás.

Arropado por los servicios jurídicos del sindicato UGT, este grupo de 12 trabajadores, de los que solo dos son capaces de expresarse en español, irán a juicio contra la empresa catalana que los contrató para realizar dichas labores y que a su vez es una subcontrata de una subcontrata de la adjudicataria de las obras de la biblioteca.

Después de haber tenido un acto de conciliación en el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación del que no salió ningún acuerdo, se reclamó por la vía judicial y la denuncia se aceptó a trámite. Previsiblemente, las primeras fechas de juicio serán este mismo mes.

Además de reclamar las cantidades correspondientes a las horas extras, los trabajadores denuncian el despido improcedente. Y es que, según explica Jesús Calvo, secretario xeral de UGT Administración, estos empleados solo pueden trabajar en las obras de la biblioteca -adjudicada a la unión temporal de empresas (UTE) Acciona-Copasa-, según establece la Ley Reguladora de la Subcontratación y, en cambio, la propia empresa establece en una notificación de fin de contrato que se les ha empleado para la «instalación de fachada y/o cubierta ventilada en la obra Ciudad de la Cultura sita en Santiago de Compostela», es decir, en todo el complejo. Por ello, y según la legislación vigente, debieran pasar automáticamente a ser trabajadores indefinidos dentro de la empresa. Sin embargo, su contrato era por obra.

Uno de los últimos trabajadores cesados, Tadeusz Dkzystek, recibió la comunicación del cese de la relación laboral el pasado 18 de agosto. Para el sindicato, se trata de un despido improcedente, al igual que el del resto de los trabajadores polacos, por lo que acudirán este mismo mes a los tribunales para conseguir la indemnización correspondiente. Y las denuncias continuarán. UGT presentará una petición en la Inspección de Trabajo para que se investigue si existe contratación en régimen de «falsos autónomos» de trabajadores ucranianos y brasileños. Es decir, cotizan como autónomos estando a las órdenes de la subcontrata, con la que La Voz no logró ayer ponerse en contacto.

Quien sí ha dado respuesta a este conflicto ha sido la Fundación Cidade da Cultura, que asegura que la UTE les ha confirmado que, ante ella, las empresas subcontratadas tienen la documentación en regla. La fundación también ha dejado claro que ejerce las funciones de control sobre las empresas principales y que los subcontratistas están obligados a responder ante el contratista principal «sen que isto supoña deixadez de funcións por parte da Fundación». Además, anuncia que ya ha abierto una investigación para velar por el cumplimiento de la legalidad y que se reserva el derecho a emprender acciones legales.