La Xunta descubre «deficiencias» muy graves en la gestión de Sogama

GALICIA

El vertedero de Areosa, con 200.000 toneladas de basura, tiene un problema de estabilidad y puede derrumbarse

13 ago 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

La contaminación a los regatos como el Porto Pereiro o el Lengüelle están a la orden del día e incluso existe un riesgo real de que se desmorone buena parte del vertedero de Areosa, que es como una montaña de 200.000 toneladas de basura. El Gobierno autónomo difundió ayer las conclusiones de la auditoría que encargó sobre la gestión del complejo de tratamiento de residuos de Sogama, situado en Cerceda, que revela la existencia de «deficiencias ambientales» que revisten especial gravedad y que afectan tanto al almacenamiento de las sustancias peligrosas como a las condiciones del transporte de los desechos o al tratamiento de las aguas residuales.

La auditoría fue elaborada por la firma de ingeniería Idom durante seis semanas, tanto en el complejo de Sogama propiamente dicho como en el vertedero de Areosa, que es donde se detectaron las mayores deficiencias.

Respecto a la planta de tratamiento, el informe no apreció un impacto ambiental reseñable, aunque sí constata las «importantes necesidades de mejora», dicen las conclusiones, que existen en el almacenamiento de las mercancías peligrosas, conformado básicamente por las cenizas que no se logran eliminar con la incineración, pues «no reúne las condiciones legales y medidas de seguridad exigibles».

«Numerosas afecciones»

Pero es en Areosa donde se registran los problemas más graves, derivados de las «numerosas afecciones» producidas a lo largo del tiempo y que afectan tanto a la contaminación de las augas y del suelo, así como a la forma de gestionar. Es más, la auditoría resalta que este vertedero ha reducido su estabilidad, en tanto que se han detectado «situaciones de importante desviación» en las pendientes de los taludes. En el mejor de los casos -añadió el subdirector xeral de Calidade Ambiental, Fernando Asperilla- la vida útil de este vertedero es de nueve meses y medio.

Otro de los graves problemas que se registran en las instalaciones adyacentes al complejo de Sogama es la gestión «anómala» de las aguas, que llegó al presidente de la sociedad, Luis Lamas, a hablar de un «desorden general». Buena parte del problema está relacionado con la gran cantidad de lixiviados que no es posible tratar. A modo de muestra, el pasado mes de julio se registraron unas necesidades de rebombear 2.430 metros cúbicos de lixiviados al día, volumen imposible de asumir actualmente en este complejo.

En este apartado, el informe constata que tampoco existe una separación por canales de las aguas y existen deficiencias en la red de drenaje.