El PPdeG estudia adjudicar en propiedad los libros de texto a las rentas bajas y medias

Luís Villamor

GALICIA

Dice que el «café para todos» del bipartito perjudicó a los menos pudientes

20 jun 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

Con mucho énfasis se debatió ayer en el Parlamento gallego sobre la gratuidad de los libros de texto, una de las medidas estrella del bipartito, iniciada con el PP, que la nueva Xunta mantendrá solo para las rentas medias y bajas y posiblemente en régimen de propiedad, en un intento de hacer «real» esta iniciativa, según el diputado Román Rodríguez.

Los populares rechazaron sendas propuestas de PSdeG y BNG en la Comisión de Educación para que se conserve el sistema de gratuidad general y no ahorraron en calificativos hacia el bipartito, que desplegó, a su juicio, una política de «café para todos que prexudicou ás familias menos favorecidas».

Rodríguez indicó que los socialistas pusieron en marcha un «sistema rancio, de propaganda e efectos perversos». Observó que, además de las familias menos favorecidas, uno de los sectores más perjudicados fue el de los libreros, sobre todo los de las periferias de las ciudades o los que vendían en zonas próximas al medio rural.

«Os libreiros tiveron unha reacción bastante negativa», subrayó Rodríguez, porque «a norma era igual para o que cobraba mil euros que para o que tiña un gran negocio».

El PP acusó al bipartito de poner en marcha un sistema «irreflexivo e antisocial». «Nós apostamos por unha gratuidade real e efectiva e non por un préstamo», expuso Rodríguez, en referencia a que los textos, con el régimen actual, no son propiedad de los alumnos. En rigor, los primeros pasos hacia la gratuidad los dio el propio PP, en el 2002, que la implantó en cuatro cursos, en la época del conselleiro Celso Currás, al que ayer el propio PSOE puso como ejemplo. «O PP tenta mellorar este programa», según Rodríguez, quien cargó las tintas sobre la «mala xestión e o galimatías» sembrado por PSdeG y BNG, que «tiveron que contratar a unha empresa, porque non sabían quen tiña que distribuír os libros, se o director ou o secretario».

«Nocturnidade e alevosía»

Guillerme Meijón (PSOE) sostuvo que la Xunta «retirou con nocturnidade e alevosía a gratuidade». Reclamó a Feijoo que vuelva al «carril correcto, o da esquerda, cunha sociedade adiantada en dereitos universais». La nacionalista Carme Adán puso de relieve que las primeras medidas del Gobierno de Feijoo sean los «recortes sociais». Demandó que se mantengan los comedores escolares y se potencien las actividades extraescolares. «A día de hoxe hai 82.000 familias que agardan que definan a súa política».