La flota de la localidad se echó al mar cuando conoció la desaparición del «Canconio», para ayudar en el rescate
03 jun 2009 . Actualizado a las 13:37 h.Los dos marineros del pequeño buque pesquero Canconio salvaron ayer la vida tras naufragar por la mañana a 8 millas al noroeste de punta Candieira, frente a la costa de Cedeira. A las 11.45 horas, la embarcación comenzó a hundirse sin que sus tripulantes, los vecinos de la localidad Fabián Barge Vilela y Andrés Sueiras Diéguez, tuvieran tiempo para hacer una llamada de emergencia. Fue la radiobaliza del pesquero la que emitió la señal de socorro.
El aviso fue recibido por el Centro de Cooridinación de Salvamento Marítimo de Fisterra, que movilizó a los medios más próximos al lugar del suceso para rescatar a los dos marineros. Intervinieron el helicóptero Helimer Galicia, con base en A Coruña; la lancha de intervención rápida Salvamar Shaula, con base en Cariño, y la lancha Langosteira, propiedad de Cruz Roja y con base en Cedeira. Al dispositivo se unió la flota de la localidad, que al conocer lo sucedido salió a la mar en busca de sus compañeros.
El rescate se completó en una hora. A las 12.45, el Helimer rescató a los dos marineros de una balsa después de que evacuaran el buque, que en ese momento ya estaba hundido, y los embarcó para trasladarlos hasta A Coruña, donde estaba previsto inicialmente que fuesen trasladados al Complejo Hospitalario de la ciudad para recibir atención médica, ya que presentaban signos de hipotermia. Sin embargo, cuando aterrizaron en el aeropuerto, los dos marineros fueron examinados por un equipo médico que se había desplazado hasta el lugar y que descartó su hospitalización, por lo que los dos náufragos pudieron partir rumbo a Cedeira. A primera hora de la tarde los dos tripulantes se encontraban ya en su localidad. Poco antes, Barge Vilela pudo ponerse en contacto con su madre, a quien le trasladó que se encontraba «bien aunque algo nervioso», según explicó ella. «A Fabián siempre le gustó el mar, lo suyo es vocación», aseguraba su progenitora. «Sus abuelos ya eran marineros y a Fabián siempre le gustó».
Una «extraña» avería
Después de que los vecinos de la localidad supieran que los dos tripulantes se encontraban bien, se inició el debate sobre las posibles causas del hundimiento del barco. Ángel González, vicepatrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Cedeira, comentó que la embarcación Canconio debió sufrir una avería «muy grave» puesto que los tripulantes no tuvieron tiempo para ni siquiera hacer una llamada. Asegura que si no hubiera saltado la radiobaliza «nos habríamos enterado por la noche porque sus familias nos habrían alertado de su falta».
«Normalmente hay tiempo para hacer una llamada a algún compañero y darle la situación del barco, pero ellos no lo hicieron. Ha sido algo muy extraño», explica González, que insiste en que «dentro de lo que cabe han tenido suerte, pues muchas radiobalizas fallan». Aunque desconoce las causas, cree que quizá fuera un «impacto» lo que provocó que el pesquero fuese a pique. Una embarcación de esas características «suele tardar en hundirse entre treinta minutos y una hora, tiempo suficiente para alertar de lo sucedido. Lo que ocurrió ayer tuvo que ser algo muy gordo». Según fuentes de la cofradía, los dos tripulantes llevan cerca de tres años trabajando con el Canconio.
Colaboración ciudadana
La reacción de la flota pesquera «ha sido impecable», aseguró ayer José Luis Vergara, alcalde de Cedeira. «Agradezco la respuesta de los ciudadanos de la localidad que, al igual que ocurrió tras el ciclón Klaus, han mostrado toda su colaboración». De igual modo, el regidor agradeció la labor de la Administración, «pues empleó todos sus recursos para rescatar a los marineros».