La policía atribuye a traficantes de coca la paliza al ex Míster España

La Voz

GALICIA

09 ene 2009 . Actualizado a las 03:17 h.

El ex Míster España vigués, Borja Alonso, permanece hospitalizado después de la brutal paliza y apuñalamiento que sufrió a manos de un grupo en la noche de Reyes en Vigo. Es probable que los agresores sean conocidos suyos, ya que, al parecer, él no quiso formular una denuncia. Varios hombres lo agredieron con un arma blanca y bates de béisbol en la vía pública en la madrugada del día 6, cuando Alonso regresaba de la zona de copas de Areal, donde acompañó a varias amigas.

La víctima fue apuñalada a la altura de las nalgas y la lesión afectó a órganos internos cercanos a la próstata. Fue operado por la unidad de urología del hospital Povisa. La mayoría de los golpes con el bate de béisbol afectaban a la misma zona.

La denuncia fue presentada de oficio por los propios médicos que atendieron a la víctima en el servicio de urgencias del hospital Povisa, tras detectar la herida por arma blanca.

La policía sospecha que la agresión puede estar relacionada con el tiro que el joven recibió en la pierna el 10 de abril del 2008. No obstante, los agentes de la unidad esperan la mejora del estado de salud del ex Míster España para poder interrogarlo en profundidad por la segunda agresión que esta celebridad de la noche viguesa sufre en los últimos nueve meses.

Fuentes policiales manejan como hipótesis principal que los agresores estén vinculados al mundo de la compra y venta de cocaína y que sean pequeños o medianos traficantes de droga.

Hace dos años, uno de los mejores amigos de Alonso fue detenido en una operación por tráfico de un kilo de cocaína en la que fueron arrestadas otras cinco personas en Vigo. El juicio de este caso se celebrará en próximas fechas en la ciudad y podría ser llamado a testificar.

No ha podido saberse de manera oficial el alcance de las lesiones que ha sufrido el joven porque el hospital no ha facilitado ninguna información al respecto por expreso deseo de la familia. El joven tampoco contestaba ayer las llamadas telefónicas a su habitación en planta.

Según las hipótesis que se barajan, la agresión se produjo en el barrio de Coia después de salir de un local nocturno y antes de llegar a otro establecimiento en el que había quedado con otras personas.

Hace unos meses Alonso recibió un tiro en la pierna por parte de unos presuntos traficantes de droga. El modelo tenía previsto relatar lo sucedido en un programa del corazón pero finalmente no se presentó al plató, arguyendo que se sintió indispuesto tras identificar a sus supuestos agresores en la rueda de reconocimiento.

Noche de copas

En el último semestre, Borja se ha recuperado del balazo y ha retomado su vida social, inseparable de la noche viguesa, donde es muy popular. Un conocido suyo recordaba ayer que vio a Borja la pasada noche de Reyes en la zona de copas de Areal, unas horas antes de la agresión. Al parecer, el ex míster fue visto acompañado de varias mujeres y su estado parecía «normal» y sobrio. «Se comportaba perfectamente. Dijo que nos veríamos luego en una discoteca de Bouzas, pero nunca apareció por allí, por lo que no supimos lo que le había pasado», recuerda dicho testigo, quien consideró la frase del joven como una mera cortesía.

Esa noche, según sus conocidos, el ex míster estuvo en las inmediaciones de Bouzas y de Coia, barrio donde reside. En las horas previas no comentó a nadie que tuviese miedo de sufrir nuevas agresiones.

«En su círculo habitual no habla de estos temas. La noche de la paliza él parecía completamente tranquilo», dice una persona que lo conoce. Todo apunta, por estas declaraciones, que el ataque fue por sorpresa, aunque otras fuentes señalan que el míster se vio envuelto en una discusión previa en un local. Por ello, la policía tampoco descarta que la agresión fuese un suceso independiente y ajeno al tiroteo.

Sus amigos relatan que en los últimos meses, el ex míster no realizaba su actividad habitual como relaciones públicas de varias discotecas, aunque sí conserva sus contactos en el mundo de la hostelería y de la noche viguesa. Alonso preparó oposiciones a bombero, trabajó como árbitro de fútbol, fue modelo y tuvo éxito como relaciones públicas en Madrid y Vigo.

Al cierre de esta edición, la policía no había practicado detenciones.