Orza advierte de que en la propuesta hecha por Solbes no existe ninguna dotación de estas características
06 ene 2009 . Actualizado a las 14:40 h.Zapatero aprovechó ayer su encuentro con los presidentes de Castilla y León, Aragón, Murcia y Castilla-La Mancha para anunciar la creación de un nuevo fondo que beneficie a las comunidades con crisis demográfica. En principio, las autonomías destinatarias serían aquellas que no se pueden acoger a las ayudas de competitividad y de cooperación, avanzadas ya por Solbes, y que se incluyen dentro del llamado fondo de convergencia. Pero la dotación hecha pública ayer en el curso de la ronda de contactos del presidente con sus homólogos regionales está destinada a las autonomías cuyo crecimiento poblacional es inferior a la media, como es el caso gallego.
De momento, se desconocen las características y los recursos del nuevo fondo, y desde la Moncloa solo han advertido de su incompatibilidad con la ayuda de convergencia, de la que Galicia sí podría ser una potencial beneficiaria -respecto a cooperación-. Ningún responsable del departamento que lidera José Ramón Fernández Antonio, conselleiro de Economía, estaba ayer disponible para aclarar la posible participación gallega en una nueva dotación diseñada para autonomías que, como Galicia, se hallan envejecidas e inmersas en un declive demográfico. «A mí esto ya me suena un poco a cachondeo; hay cuatro o cinco comunidades que van a salir beneficiadas, como ya podremos comprobar, y el resto se irá apañando: no sé a qué se refiere Zapatero con este fondo y si puede encajar Galicia; en el modelo actual existe ya una compensación para autonomías con baja densidad poblacional, como Aragón o Extremadura, pero en el documento que nos han hecho llegar de Solbes no aparece ninguna dotación de estas características», explicó ayer a este periódico José Antonio Orza, ex conselleiro de Economía y diputado del PPdeG.
De las palabras del presidente castellano-leonés a la salida de su reunión con Zapatero se concluye que se trata de una solución a medida para aquellas comunidades que «se han quedado en tierra de nadie» en relación a los dos fondos propuestos en el nuevo modelo de Solbes.
A unas semanas de que se celebre el Consejo de Política Fiscal y Financiera, la Xunta aún no ha trasladado a los grupos parlamentarios qué cantidad concreta le reclama al Estado en el marco del actual proceso de financiación autonómica. De hecho, la Consellería de Economía está todavía a la espera de fijar una nueva reunión con los grupos parlamentarios.
«Aínda non sabemos a data na que seremos convocados; pero estou moi preocupado: se a Xunta non calculou a cifra, quere dicir que, nun proceso clave para o noso futuro, imos a remolque do que están a facer os demais; e se a calculou e non a dá, é grave porque estaría ocultando información», argumentó ayer el diputado nacionalista Carlos Aymerich.
La Xunta aprovechó el arranque del año para demandar a los grupos parlamentarios un consenso capaz de crear un frente común en materia de financiación. José Ramón Fernández Antonio, el conselleiro de Economía, considera que la filosofía del modelo -en la que ponderará el envejecimiento y la dispersión en relación con el gasto de los servicios sociales- favorece a Galicia, pero advierte de que el partido está en juego, con lo que es posible obtener un resultado más favorable si la comunidad es capaz de negociar con todas las fuerzas unidas.
Sin embargo, tanto populares como nacionalistas han advertido al Gobierno gallego que no darán su respaldo a la Xunta hasta conocer las cantidades que demanda Galicia para atender sus servicios. De hecho, el propio Orza, ex conselleiro, considera que es fundamental que la comunidad no pierda posiciones relativas en el nuevo modelo y que se primen aspectos como la emigración.