Veinte personas esperaban por una cama ayer por la mañana en el servicio de urgencias del hospital del Meixoeiro, en Vigo. Estaban ingresadas, pero la escasez de medios había obligado a tumbar a los pacientes en camillas y a dejar a otros en la sala de observación. Solo tres médicos atendieron los ingresos urgentes y las observaciones a lo largo de toda la mañana.
El Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi) se vio en la obligación de suspender operaciones programadas para poder liberar camas y destinarlas a ingresar pacientes de urgencias. Según el Servizo Galego de Saúde (Sergas), lo que se hizo fue «reprogramar» cirugías, es decir, varias operaciones previstas para ayer que requerían un ingreso hospitalario se aplazaron y en su lugar se realizaron otras de tipo ambulatorio, o lo que es lo mismo, sin ingresar. Fuentes oficiales de Sanidade califican tal medida de «habitual».
La situación afectó ayer a todo el complejo hospitalario de Vigo, si bien el centro más castigado fue el hospital del Meixoeiro. Es el complejo de referencia, principalmente para la zona rural del área sanitaria.
El domingo, el Chuvi registró 633 urgencias, que bajaron a 511 el lunes -la media diaria es de 540-; casi todas ellas se concentraron en el Xeral, en el centro de la ciudad. La situación ayer fue más suave con ese hospital, pero mucho más dura con el Meixoeiro.
El sindicato Comisiones Obreras (CC.?OO.) denunció a través de un comunicado que la escasez de plantilla es muy grave y que el Sergas no está cumpliendo los planes funcionales.
Cinco bajas sin cubrir
El servicio de urgencias del Meixoeiro está compuesto por 24 profesionales. Pero cinco de ellos tienen una baja laboral que no se ha cubierto, dos tienen un contrato de media jornada y otros dos están de vacaciones. Según el sindicato, las malas condiciones laborales que ofrece la Consellería de Sanidade a los profesionales los aboca a la emigración en busca de estabilidad en el empleo.
El Servizo Galego de Saúde informó ayer a media tarde de que todos los pacientes que habían llegado a urgencias y necesitaban un ingreso tenían ya una cama asignada. La situación, según las fuentes oficiales de la sanidad pública, se había normalizado por la tarde. Según el Sergas, estos días se vive una situación complicada pero habitual en esta época del año. Por eso, la dirección provincial quiso ayer dejar claro que no se trata de una coyuntura «caótica».
El Sergas, además, desmintió que vaya a derivar pacientes a otras áreas sanitarias. Fuentes del organismo aseguran que se utilizarán todos los recursos disponibles en el área sanitaria de Vigo.