El fiscal investiga al ex edil tránsfuga por hacerse pasar por alcalde de Sada

GALICIA

14 nov 2008 . Actualizado a las 02:09 h.

La Fiscalía investiga al médico y ex concejal tránsfuga de Sada José Luis Santamaría por firmar un informe urbanístico en el que se hacía pasar por alcalde accidental y que facilitó la venta de una casa sin licencia que la Xunta ordena demoler desde hace años. El documento carece de registro de entrada o salida y justifica que la vivienda en cuestión «ten unha antigüidade superior aos sete anos e non se lle tramitou nin se lle está tramitando ningún expediente por infracción urbanística», cuando el único permiso que tenía esta finca era el otorgado tres años antes por Urbanismo para construir una caseta de madera desmontable.

El escrito está firmado durante una jornada -la correspondiente al 22 de junio del año 2004- en que el alcalde de Sada en ese momento, Ramón Rodríguez Ares, ejercía sus funciones plenamente, puesto que firmó hasta nueve decretos en su despacho. Meses antes de esta maniobra (en el 2003), José Luis Santamaría facilitó una moción de censura en Sada que devolvió la alcaldía al regidor que supuestamente suplantó en ese informe. Este tránsfuga del PSOE formó parte del gobierno de Rodríguez Ares e incluso concurrió en las elecciones con la formación que el alcalde fundó tras ser expulsado del PP, el Partido Demócrata Sada Popular.

La Fiscalía tiene noticias de posible falsedad documental cometida por Santamaría por varias denuncias. Una de ellas, interpuesta por un vecino de Carnoedo, parroquia donde está la casa, detalla que en la finca de 736 metros donde se dio licencia para colocar una caseta para utensilios de labranza se construyó «una edificación de 100 metros cuadrados». El expediente indica que la Consellería de Política Territorial dictó una resolución en la que declara «ilegalizable» la vivienda y ordena su demolición. Los dueños de la casa trataron de elevar a escritura pública la edificación en varias ocasiones, y para una de ellas utilizaron el documento en el que Santamaría firmaba como alcalde accidental. De hecho, lograron que un notario elaborase una escritura. «No solo se ha conseguido elevarlo a escritura pública, sino que se ha podido registrar en el Registro de la Propiedad de Betanzos», detalla la documentación del caso, que también da cuenta de la venta a una tercera persona. Además de la falsedad documental, la Fiscalía investiga si se cometió una estafa en la transmisión de la vivienda, «sobre la que existe una orden de demolición por ser del todo ilegalizable».

Juicio por las recetas

Mientras, ayer se celebró la tercera sesión del juicio que trata de esclarecer si Santamaría, la farmacéutica de Sada Isabel Osorio y el director de la clínica Euroespes de Bergondo, Ramón Cacabelos, urdieron una trama para lograr medicamentos gratis con fotocopias de las cartillas de ocho pensionistas, pacientes del centro de Cacabelos.

Ante las afirmaciones de los trabajadores de la clínica, que apuntaron que esas prácticas buscaban ahorrar dinero y esfuerzos a sus pacientes, las acusaciones informaron de que los autores de la trama utilizaron, sin su conocimiento, la cartilla de Roberto Tojeiro, presidente de Gadisa, para lograr medicamentos gratis con cargo al Sergas. Dos médicos que trabajaron en el ambulatorio de Sada se desmarcaron de las prácticas de Santamaría de prescribir masivamente, incluso los domingos. Este argumentó ayer que calculó mal cuando aseguró en la vista que firma cerca de once millones de recetas al año. Sin embargo, en las actas del juicio figura ese dato. «Este año llevo 40.000 a pensionistas», alegó.