Un matrimonio de Zas lleva 73 años unido, con el único paréntesis de la Guerra Civil

SOCIEDAD

Esperanza, de 99 años, y Daniel, de 97, se casaron en 1935 y se consideran felices

25 oct 2008 . Actualizado a las 13:03 h.

Las rupturas matrimoniales se han convertido en el pan de cada día de la sociedad moderna, y el número no cesa de aumentar exageradamente cada año. Pero en medio de este contexto, a veces surgen historias con nombre propio que hacen que uno recupere la fe en el amor. Como la dulce estampa que protagonizan Daniel Manuel Brenlla López y Esperanza Blanco Suárez, una pareja de la parroquia de San Adrián (Zas), en la Costa da Morte, que lleva más de 73 años casada. Ella cumplirá un siglo de vida dentro de cinco meses y él tiene ahora 97 años de edad.

Ambos se encuentran muy bien de salud y con mucha energía, aunque Daniel de Chico, como se le conoce en el pueblo, tiene continuos dolores en una pierna. Esperanza, por su parte, está casi tan ágil como una adolescente y comienza la jornada todos los días a las ocho y media de la mañana como muy tarde, con la cabeza perfectamente amueblada, porque si no «non me chega o día para facer todo o traballo», como suele decir. No toma ningún tipo de medicación y goza de una salud envidiable. Su abuela ya había llegado a los 105 años.

Su marido trabajó como obrero del Ayuntamiento durante muchos años, e incluso fue pionero abriendo pistas en el municipio. Además, en sus ratos libres era regueifeiro, y aún continúa ofreciendo algunos versos cuando la ocasión se presta. Mientras, su mujer siempre estuvo en casa.

Inseparables

En el año 1935 se juraron amor eterno y, desde entonces, no se han separado ni un solo día, salvo en los tiempos de la Guerra Civil. Con ellos viven su hija Erundina y su yerno, Ernesto, que cuidan de ellos y admiran el amor que se sigue profesando esta pareja después de tanto tiempo (dentro de poco cumplirán las bodas de platino). El suyo es un caso excepcional, aunque no único. En Galicia se han conocido otras historias de parejas que han cumplido (e incluso superado) los 75 años de matrimonio, en los concellos de Rodeiro, Abegondo, Carboeiro o Agolada.

En el caso de Esperanza y Daniel, Erundina dice que desde que tiene uso de razón nunca los ha visto acostarse sin hablar uno con el otro. «Case nunca os vin discutir nin estar enfadados, e se discuten por algo, pouco lles dura e deseguida se arreglan», explica esta mujer.

El secreto de su feliz y longevo matrimonio, uno de los más veteranos de la Costa da Morte, parece ser el cariño, el diálogo y la complicidad que mantienen entre ellos. «Son moi cariñosos un co outro e non reñen por asuntos sen importancia. Ás veces, un ten que dar o brazo a torcer para que a cousa vaia ben», continúa su hija. Y así siguen, con un amor tan vivo como el primer día.