Portas se resiste a perder el tren

GALICIA

La pequeña localidad pontevedresa se queda sin ningún servicio de transporte público con la apertura hoy de la variante de alta velocidad entre Portela y Vilagarcía

20 jul 2008 . Actualizado a las 02:09 h.

El 24 de noviembre del 2007 se constituía la plataforma de afectados Portas non pode perder o tren. La portavoz del colectivo, Lucía Latorre Búa, leía, sentada en el único banco de la vieja estación de ferrocarril de la localidad pontevedresa, el comunicado fundacional.

Casi ocho meses después, esta mujer, procuradora de profesión, repasa, en el mismo banco, la lucha ciudadana llevada a cabo para defender el servicio regional (media distancia para Renfe) y que los convoyes sigan parando en la vieja estación. El pasado viernes un cartel de Renfe pegado en la puerta de entrada informaba a los vecinos de la peor de las noticias: «Con motivo de la entrada en servicio de la nueva variante de Portas, a partir de las 6 horas del día 20-07-08, los trenes de Renfe de media distancia dejarán de pasar por la estación de Portas, al quedar la estación fuera de servicio».

Paradójicamente, encima de ese cartel, hay otro de la plataforma que alude a la movilización realizada el 5 de julio. Una caravana lenta de vehículos por la carretera N-550, entre Milladoiro y Vigo, como «última oportunidad de presionar al Gobierno y que recapacite».

Hasta la entrada en servicio hoy de la variante del AVE de Portas, siete trenes al día en cada sentido paraban en este municipio de poco más de tres mil habitantes que cuenta con ferrocarril desde hace 109 años. La estación fue perdiendo vida en las últimas décadas y nada más poner un pie su aspecto es de un abandono absoluto. Pintadas, telarañas y suciedad conviven con los pocos viajeros que esperan en el andén para coger el tren.

«Para mí estos días son de profunda tristeza e impotencia -comenta Lucía Latorre-, pero me voy a despedir del tren como me despediría de un amigo que va a pasar por un mal trance, pero al que sé que voy a volver a ver». Pese al mazazo, la portavoz de la plataforma se muestra firme y convencida de que todavía hay vuelta atrás. «Nosotros no estamos en contra del AVE, pero lo que defendemos es una causa justa. En Portas, el tren es el único transporte público que tenemos y el que usa la gente que no tiene coche».

El colectivo tiene claro que si son escasas las personas que usan el tren es porque pasan pocos y algunos a horas no operativas. Aun así, defiende este servicio. «Esto es un desierto, pero queremos seguir teniendo nuestros camellos», dice Lucía Latorre, en alusión a los trenes lentos que son los que paraban en Portas. «Lo que demandamos es de justicia, no es una limosna. Pedimos que los trenes rápidos vayan por la variante y que los lentos sigan parando aquí, ya que por la vía va a circular un mercancías para una empresa cementera que solo genera dos puestos de trabajo».

Constitución

La portavoz del colectivo alude a la Constitución Española para reforzar sus tesis. En concreto, al artículo 45.2, que dice que «los poderes públicos velarán por la utilización racional de todos los recursos naturales, con el fin de proteger y mejorar la calidad de vida y defender y restaurar el medio ambiente, apoyándose en la indispensable solidaridad colectiva».

La conversación con Lucía Latorre coincide con la llegada de una persona mayor a la estación, que va a tomar el tren con destino a Pontevedra para visitar a un familiar que está internado en un hospital. «¿Para que serviu todo o que fixemos?», se pregunta con resignación. En la cafetería de la estación, que seguirá abierta porque es una concesión, su propietaria, Mercedes, aclara que no perderá mucha clientela porque los viajeros del tren no suelen consumir.

Cerca de Portas, en una parroquia de Caldas de Reis, el hecho de que ya no pase el tren es motivo de satisfacción. En Godos varias personas perdieron la vida en dos peligrosos pasos a nivel y ahora pedirán a Fomento, con el apoyo del Ayuntamiento, que se levanten las viejas vías y se conviertan en una ecovía o vía verde para peatones.